En la línea de otros ayuntamientos, el pleno del Puig de Santamaría ha fijado también sueldos y retribuciones de cargos públicos para los próximos cuatro años. De este modo, la alcaldesa Luisa Salvador estará liberada con dedicación exclusiva mientras que seis ediles lo estarán a media jornada en el consistorio.

La socialista Salvador percibirá 45.000 euros brutos anuales distribuidos en salarios y pagas, mientras que para el cargo de concejal liberado se establecen 22.778 euros (de los que, en este caso, cobrarán un 50%). La mandataria indica que en 2015 el pleno aprobó una retribución para ella de 39.900 euros brutos anuales que, con la actualización anual, se habían convertido en 41.000 en 2019, «por lo que hemos aplicado una subida mínima al sueldo global». Y la mandataria defiende que el mismo criterio se ha aplicado a la remuneración establecida para la liberación de ediles y edilas.

No obstante. el grupo municipal de Compromís, en el gobierno con el PSOE en el pasado mandato y ahora fuera al haber logrado la alcaldesa mayoría absoluta,ha criticado que la primera medida de la legislatura sea «subirse unilateralmente los sueldos (...) haciendo uso de su estrenada mayoría absoluta».

Compromís tilda de «vergüenza» y «ruptura absoluta del principio de austeridad» que se habría acordado hace cuatro años, además de remarcar que la aprobación de salarios se produce «con el único voto favorable del equipo de gobierno».

La coalición incide en que «el nuevo sueldo de la alcaldesa bordea el máximo legal convirtiéndose en el cargo público mejor pagado de todos los pueblos de la Horta Nord con menos de 10.000 habitantes».

Por su parte, Luisa Salvador ha lamentado «la incoherencia y poca ética» de Compromís ya que «hace cuatro años los sueldos que se aprobaron fueron los que propuso el PSOE y durante la legislatura, en diversas ocasiones, en concejal había pedido que se subieran porque eran bajos». «hay que defender lo mismo dentro y fuera», recalca la edila.