El Ayuntamiento de Alboraia abordará para las próximas fiestas un horario de cierre de las casetas y jaimas en torno a las 2,30 horas, para evitar incidentes como los sucedidos el pasado jueves y que ya obligaron al consistorio a actuar con celeridad.

Las casetas de las fiestas están ocupadas por asociaciones del municipio, así como clavarías y collas. Están situadas junto a la Casa de Cultura, a la entrada del polígono. Allí se ofrece comida y bebida durante el programa oficial de actos para sacar algún beneficio económico para sufragar actividades de los citados colectivos durante el resto del año.

Es ya tradición que una vez finalizan los espectáculos de las fiestas en el escenario principal, sobre las 2 o 2,30 horas, las casetas y jaimas alargan la noche hasta pasadas las cuatro de la madrugada con música, actuaciones de grupos, así como la venta de comida y bebida. Y como suele pasar también, la palabra discomóvil atrae a pandillas de jóvenes de los alrededores en busca de alcohol y música actual. La combinación acabó la noche del jueves en una pelea de consideración entre varios grupos, que obligó a intervenir a la Policía Local y a cerrar las casetas.

Tras el informe policial, el Ayuntamiento de Alboraia sacó el mismo viernes un bando en el que comunicaba que «por temas de seguridad ciudadana y debido a los altercados sucedidos durante estos días, se ha decidido para garantizar una mayor seguridad y prevención, acortar el horario de cierre de la zona joven hasta que finalice la orquesta, eliminando las discomóviles y puntos de música posteriores».

Desde el consistorio defendían la postura como medida de «prevención» para evitar que una «pelea pase a mayores y se descontrole». En este sentido, las mismas fuentes anuncian que el asunto está encima de la mesa de cara al próximo año con el objetivo de regular el funcionamiento de las casetas en cuanto a su horario de cierre.