Con mascarilla, distancia, entrada y salida escalonada y desinfección posterior. Así se ha celebrado este martes por la tarde la Ofrenda de Flores a la Virgen, organizada por la falla Sant Roc de Torrent en el templo de la Asunción, a la que han asistido unas 140 personas, de las que unas 40 iban vestidas con la indumentaria valenciana.
La emoción de las falleras mayores y de todas las personas participantes era palpable en el breve acto que se ha realizado, siguiendo un fuerte protocolo de seguridad sanitaria. La comisión se dirigió a la parroquia y pactó la celebración de este acto, cumpliento el aforo y con las restricciones que ha impuesto la crisis sanitaria.
"Es una sensación rara pero hay que adaptarse a las circunstancias", ha expresado Ana Ortíz, fallera mayor de la comisión, con lágrimas en los ojos. La representante ha agradecido que parte de la comisión "se haya sacrificado" y no haya acudido para que otros sí pudieran hacerlo y se cumpliera un aforo, fijado en 200 personas, que no se ha cubierto.
La entrada al templo ha sido escalonada y, una vez en el interior, falleras y falleros se han distribuiodo en los bancos y las capillas laterales, cumpliendo la distancia de seguridad. Las personas que iban vestidas con la indumentaria valenciana han ocupado las primeras filas y el resto se ha situado a continuación. La silueta de las mantillas sobre las falleras con el altar repleto de flores al fondo dibujaba una imagen que la crisis sanitaria casi había borrado.
Tras depositar las flores y un sencillo acto, se ha finalizado con el "Himno de la Comunitat Valenciana", que ha hecho llorar a muchos de los falleros y falleras asistentes. Esta comisión, como las restantes de la ciudad, donde existen 29 casales, llevaba sin vivir este tipo de celebración dos años.
El presidente de la falla Sant Roc, José Ortega, también emocionado, ha explicado que era "una alegría enorme" porque "de no tener nada a poder celebrar este acto, el ánimo de la gente ha subido mucho y la ofrenda ha sido un aliciente". Ortega explica que cada comisión en la ciudad ha pactado las condiciones con su parroquia de referencia "dependiendo de las condiciones" de cada recinto y las posibilidades de cada falla.
En el caso de la Asunción, los responsables del templo pactaron con Sant Roc un día y una hora concreta, que no coincidiría con la celebración de una misa, para que tuvieran más aforo. "Hay gente que no ha podido venir porque hoy no es festivo pero lo importante es haber podido hacerlo", ha expresado.
Por su parte, los responsables del templo han indicado a Levante-EMV que, acdemás de la entrada y salida escalonada, se ha acordado con cada comisión que acuda "una desinfección de la parroquia posterior" que representantes de Sant Roc han iniciado nada más acabar el acto.
