La Aliança per l'Emergència Climàtica de Paterna, l'Eliana i San Antonio ha denunciado que "es casi imposible vivir en Paterna sin tener que recurrir al coche para desplazarse", ya que la movilidad está organizada para el vehículo privado y "una buena parte de los desplazamientos internos como la mayoría de los que se hacen hacia el área metropolitana se basan en este medio de transporte".

Este colectivo explica que ha estudiado el Plan de movilidad urbana sostenible de Paterna, que es del año 2009, "para constatar su falta de cumplimiento". "Y ahora pedimos al alcalde de Paterna que no apruebe otro plan de movilidad si no piensa cumplirlo", advierten.

El objetivo del plan era “mejorar la movilidad en general y por medio de actuaciones disuasorias de la utilización del vehículo privado, y ofreciendo alternativas válidas y de mayor calidad que permitan incidir sustancialmente en el reparto modal de los modos mecanizados”. Para ello, el plan planteaba alternativas que hubieran facilitado la movilidad peatonal, en bicicleta y en transporte público, "pero no se han materializado", en opinión de la Alianza.

El plan incluye, entre otras propuestas, la creación de itinerarios escolares seguros para todos los centros y concreta itinerarios para que las familias se decidan a dejar que sus hijas e hijos vayan solos y seguros al colegio o al instituto. "Esta propuesta aún no se ha hecho realidad en todos estos años", detalla la asociación ecologista.

También en el plan se hablada de crear zonas de convivencia, o lo que ahora se denomina “zona de bajas emisiones”, con restricciones al tráfico rodado, en el interior del anillo formado por las calles Vicente Lerma, calle Mayor, calle del Castillo y línea de FGV, que se tenía que ampliar a las calles Virgen de Montiel y adyacentes para crear dos potentes nucleos de convivencia vertebrados por la calle Mayor, lo que "tampoco se ha ejecutado".

Respecto a la pasarela para conectar Lloma Llarga con la calle Carcaixent, que daría acseso al centro comercial Heron City, sobre la autovía CV‐35, la Alianza denuncia que "tenía un plazo de ejecución de cinco años, que pasaron hace siete, y no se ha realizado tampoco".

Respecto a la Canyada, el plan apostaba por la “puesta en marcha de un plan de concienciación enfocado a la liberalización de tráfico de vehículos en la plaza, mediante la propuesta de impedir el acceso de los mismos un fin de semana al mes”, como se hizo en València con la plaza del Ayuntamiento. "Hubiera sido un primer paso para peatonalizar la plaza y ganar ese espacio para la ciudadanía. Pero aún estamos esperando al primer fin de semana sin coches en esta plaza".

En materia de polígonos industriales, con amplias superficies en la ciudad, el 80 por cien del personal se desplaza en vehículo privado al trabajo, "lo que ocasiona importantes emisiones contaminantes y de efecto invernadero, además de congestión de tráfico". Y eso a pesar de que las plantillas de las empresas han manifestado en diversas encuestas "su voluntad de utilizar transporte de empresa, coche compartido, transporte público y bicicleta". "En estos 12 años solo se ha puesto en marcha una línea de autobuses lanzadera" a diversos núcleos industriales, "que aún es poco utilizada",

Sobre el transporte público, en el plan se recogía la necesaria mejora de frecuencias para que las personas usuarias dejen en coche en casa. "Con las frecuencias actuales, tanto de bus como de metro, especialmente desde la parada de metro de Santa Rita hacia Llíria, con frecuencias de cada media hora, es difícil que este cambio se pueda realizar de forma masiva", denuncia Emergència Climàtica.

"Si se hubieran puesto en marcha las medidas del plan, ahora la fisonomía de Paterna sería diferente: barrios mejor conectados por transporte público más eficiente, todos los barrios accesibles por modos peatonales, ciclocalles, carriles bici y amplias zonas peatonales para una convivencia relajada, escolares yendo solos al colegio con sus amigas y amigos en itinerarios seguros, personal de los polígonos utilizando coche compartido, autobús de empresa y transporte público, y, en definitiva, un municipio más adaptado para los requerimientos de la emergencia climática en la que vivimos, ya que para cumplir el objetivo de emisiones neutras de carbono vamos a tener que cambiar mucho más nuestro estilo de vida, y lo podemos hacer mejorando nuestra calidad de vida en una ciudad más amable y acogedora. Con participación ciudadana e implicación institucional, el reto de hacer de Paterna una de las grandes ciudades valencianas más habitables y saludables puede hacerse realidad", reflexionan en la Aliança.

Sobre el anuncio de la concejala Nuria Campos de su intención de redactar otro plan de movilidad, el colectivo ve "una gran irresponsabilidad y un gasto innecesario realizar planes para no cumplirlos, como se ha hecho hasta ahora". "Por eso exhortamos al equipo de Gobierno a redactar el nuevo PMUS con participación vecinal y para ejecutarlo, y no solo para darle publicidad y que se quede en papel mojado, como ha pasado hasta ahora", recalcan.