El Casal de la Pau–Domus Pacis ha recibido la Mención Colibrí que otorga la Fundació Horta Sud, por su tarea humanitaria durante casi 50 años. El Museo Comarcal acogió la entrega de la séptima edición de esta iniciativa, que cada año reconoce el trabajo de una entidad en defensa de los derechos humanos y de los valores democráticos.

El acto empezó con la entrega por parte de la presidenta de la Fundació l’Horta Sud, Imma López, del diploma de reconocimiento al presidente y fundador del Casal de la Pau, José Antonio Bargues.

Asimismo, tuvo lugar un debate abierto entre la veintena de personas que acuedieron a la sede de l’Horta Sud. El voluntario en el Centro Penitenciario de Picassent y autor del libro «Esperanza entre rejas», José Miguel Martínez Castelló, puso en valor los esfuerzos de entidades como el Casal de la Pau para llegar donde las instituciones no llegan. «Los presos necesitan que la sociedad esté a su lado por no reincidir», declara.

Por parte de los miembros del Casal de la Pau, presentes en el acto, Ramón Llorenç añadió la necesidad de «hacer de la convivencia un derecho para todo el mundo». Asimismo, Honorat ReSudrección puso énfasis en diferentes retos que hay que superar para avanzar como sociedad. Entre ellos, explica que la misma sociedad tiene que ser más resistente, y asumir que hay personas disruptivas y que hay que aprender a convivir con ellas.

«Con pequeños cambios al código penal o con más sensibilidad de los jueces, disminuiría mucho el número de personas tomadas», considera Resudrección.

Con este reconocimiento, el Casal de la Pau se suma a la Plataforma CIEs NO, la Plataforma Pobreza Cero, Setem, Centre Delàs de Estudis per la Pau, Open Arms y Asociaciones de Solidaridad con el Pueblo Saharaui como entidades «colibrí», que recibieron la mención en años anteriores.