El Consejo de Ministros, a propuesta del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO), ha autorizado este jueves el contrato de obras para modernizar la Estación depuradora de aguas residuales (EDAR) en Torrent, por medio de la adecuación del sistema de saneamiento y depuración. La intervención tiene un valor estimado de 26.665.417,47 euros (más el IVA, que elevan la inversión a 32.265.155,14 €).

 

La iniciativa tiene como objeto definir y valorar las obras necesarias para dotar de plena funcionalidad al conjunto de elementos que constituyen la EDAR en la ciudad. Entre las actuaciones acordadas se encuentra la construcción de un tanque que reduzca el número de vertidos de su red al barranco del Poio, como se han producido en ocasiones, minimizar los impactos sobre el entorno, en especial los olores y ruidos, y adecuar el tramo final de la red de colectores de llegada a la EDAR (Norte, Sur y Vedat).

Además, se remodelará la planta para que los procesos de tratamiento sean compatibles con el curso de agua en el que se descargan las aguas residuales y la reutilización para riego, y se procederá a demoler todos los elementos innecesarios, además de la construcción de una pantalla vegetal, entre otros.

 

La aprobación se realiza tras efectuar un informe de impacto ambiental en el que se concluyó que no es necesario someter el proyecto a un procedimiento de evaluación ambiental ordinaria. De esta manera, el Secretario de Estado de Medio Ambiente, Hugo Morán, emitió en junio el informe de viabilidad favorable del proyecto y se aprobó de manera técnica la iniciativa, por un presupuesto base de licitación de 32.265.155,14 € (con IVA del 21%), en un plazo de ejecución de 30 meses, que incluye 6 meses para el período de puesta a punto y pruebas de funcionamiento.

Una instalación casi obsoleta

Según la documentación gubernamental, la depuradora de Torrent fue construida a finales de los años 70 y posteriormente fue ampliada en 1994. La planta da servicio a la ciudad y a diversos polígonos industriales de la zona. En la instalación se cuenta con pretratamiento, tratamiento primario y secundario, y la estabilización de los fangos se realiza de manera anaerobia. La EDAR no dispone de tratamiento terciario y "su estado actual presenta algunas disfunciones que dificultan que su efluente alcance las condiciones establecidas de vertido". 

Respecto a las instalaciones complementarias, el proyecto recoge que existen tres grandes colectores que transitan el influente, Norte, Sur y Vedat, cada uno con características diferentes, que han sido construidos en épocas distintas. "El municipio no dispone de ningún elemento regulador de la red de saneamiento-pluviales, tan solo aliviaderos", incide el documento.

En la actualidad el caudal influente es de 14.000 – 15.000 m3/día, "de un agua típicamente urbana de media carga", con una carga real de 150.000 h-e, y "el modo de funcionamiento es singular, ya que tan solo un tercio del caudal que llega a la depuradora es tratado completamente mientras que el resto es enviado desbastado a la EDAR de Pinedo".

"La planta es antigua, y ha sido remodelada en varias ocasiones, aunque su estado de conservación es aceptable, los equipos y la tecnología ya están alcanzando su ocaso de vida", concluye el ministerio. 

Coordinación interadministrativa

Fuentes del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (Miteco) han indicado que "la mejora del saneamiento y la depuración de las aguas residuales es una prioridad". Y para mejorar las estrategias de intervención en este ámbito de actuación, se ha preparado el Plan Nacional de Depuración, Saneamiento, Eficiencia, Ahorro y Reutilización (Plan DSEAR) que, en estos momentos, está completando su proceso de evaluación ambiental, que se espera aprobar en las próximas semanas. Este Plan DSEAR incidirá directamente sobre la revisión en curso de los planes hidrológicos para el periodo 2022-2027.

 

"El propósito que se persigue con todas estas acciones es alcanzar un pleno cumplimiento de las obligaciones de depuración establecidas en la Directiva 91/271/CEE, y con ello y otras medidas de restauración y recuperación ambiental, cumplir con los exigentes objetivos ambientales que señala la Directiva Marco del Agua antes de final de 2027", indican en el ministerio.

 

Para ello, "es esencial la actuación coordinada de todas las administraciones competentes involucradas", afirman en Transición Ecológica, además de recordar que "la recogida y tratamiento de las aguas residuales son, en su mayor parte, competencia de las Administraciones locales y autonómicas, limitándose la responsabilidad de la Administración General del Estado para aquellas actuaciones que hayan sido declaradas de interés general".