Efe, Guatemala

Los cuerpos de socorro rescataron ayer los cadáveres de 133 personas que llevaban tres días sepultados por un alud de tierra en una comunidad indígena del oeste del país, con lo que la cifra oficial de muertos por las lluvias asciende ya a 652.

Un portavoz de la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (Conred), dijo que los cadáveres fueron rescatados en Tacaná, una comunidad indígena ubicada unos 280 kilómetros al oeste de la capital guatemalteca, fronteriza con México. «Lamentablemente hasta hoy no fue posible llegar a ese lugar, ya que los derrumbes en las carreteras y el mal tiempo lo habían impedido. Estas personas quedaron soterradas por un alud que destruyó sus residencias», precisó la fuente.

El pasado viernes, los habitantes de comunidades vecinas habían rescatado unos 150 cadáveres en ese mismo lugar.

Declaración de cementerio

Aunque oficialmente la cifra de desaparecidos es de 384, diversas fuentes consideran que la misma podría ser ampliamente superada debido a que las denuncias de personas que pueden estar enterradas bajo el lodo supera las 3.000.

El poblado indígena de Panabaj, en el municipio de Santiago Atitlán, situado unos 180 kilómetros al oeste de la capital, el cual quedó completamente sepultado por un alud el pasado miércoles, y en donde se cree quedaron enterradas unas 3.000 personas, fue declarado el domingo camposanto por las autoridades municipales. Los trabajos de rescate en Panabaj fueron suspendidos el sábado por la noche, debido a la falta de equipos para trabajar y al temor de que los cadáveres ya descompuestos puedan provocar un brote de epidemias.

Se espera que en las próximas horas lleguen a ese lugar especialistas sanitarios del Ministerio guatemalteco de Salud, para coordinar los trabajos de sellado del improvisado cementerio.

Contingentes de bomberos y sanitarios especialistas en desastres naturales, procedentes de España y Francia, con equipos especiales y perros adiestrados, se han unido a los cuerpos de socorro locales para colaborar en las labores de rescate en las comunidades en donde se han reportado personas desaparecidos.

Un portavoz de los Bomberos Voluntarios de Guatemala, dijo que se espera que en las próximas horas lleguen al país más socorristas procedentes de Italia, Nicaragua y México.

El informe oficial de la Conred señala que 130.139 personas han resultado damnificadas de forma directa, 89.675 reciben ayuda en los 280 albergues habilitados, 1.291 viviendas fueron destruidas, 5.225 afectadas, y 421 comunidades de doce de los 22 departamentos fueron golpeadas por los estragos causados por la tormenta tropical Stan. Sin embargo, el vicepresidente guatemalteco, Eduardo Stein, aseguró que la cantidad de damnificados de forma directa por el fenómeno natural puede superar los 3,5 millones.