El papa aseguró este viernes que para él "era un deber" ir a Irak, una "tierra martirizada", a pesar de la controversia generada con esa visita por los riesgos derivados de la pandemia y de los últimos ataques con misiles contra bases de la coalición internacional.

Francisco hizo esa afirmación en el vuelo que le lleva a Irak para un viaje de tres días, uno de los más difíciles y arriesgados de su pontificado, con la decidida intención de estar cerca de la comunidad cristiana en el país, brutalmente perseguida por los terroristas del Estado Islámico (EI).

El papa, con mascarilla, saludó a los 75 periodistas que le acompañan en la visita a Irak y dijo estar "contento por retomar los viajes internacionales" tras más de un año sin poder viajar al extranjero debido a las limitaciones impuestas por la COVID-19.

Como es habitual, aunque con mascarilla y sin estrechar las manos, el papa saludó uno a uno a los representantes de los medios de que le acompañan en este desplazamiento.

Francisco recibió como regalo una réplica de la lista de precios establecida por el EI como precio para las jóvenes cristianas y yazidíes que fueron secuestradas por los yihadistas y puestas a la venta como esclavas sexuales.

Esta brutal persecución de las que han sido objeto los cristianos y las minorías ha llevado al papa a realizar un viaje que había sido aplazado en otras ocasiones por la inestabilidad del país y que tanto quiso realizar Juan Pablo II.

También recibió como regalo un copia del libro "Yo seré la última", de la Premio Nobel yazidí Nadia Murad, que cuenta su cautiverio cuando fue utilizada como esclava sexual por el EI, que previamente masacró a su familia. La joven se ha convertido en su voz y fue galardonada por sus esfuerzos para erradicar la violencia sexual como arma en guerras y conflictos armados.

A su llegada al aeropuerto de Bagdad, esperará al papa a pie de escalerilla el primer ministro iraquí, Mustafa al Kazemi, y dos niños con trajes tradicionales le ofrecerán flores.

Tras una discreta ceremonia de bienvenida, el papa y el jefe del Gobierno se reunirán en privado en una de las salas del aeropuerto de la capital.

Su primer acto oficial será la reunión con el presidente del país, el kurdo Barham Saleh, y el discurso que pronunciará en el palacio presidencial ante las autoridades y miembros del cuerpo diplomático.

En solo tres días, el pontífice irá al sur, a Ur de los Caldeos, y al norte, a la llanura de Ninive y las ciudades de Mosul y Qaraqosh, destrozadas por el EI y donde se concentraba la población cristiana que ha quedado reducida a la mitad, además de a Erbil, la capital del Kurdistán, que dio cobijo a los que huían de los yihadistas. 

El papa envió un telegrama a los palestinos    

"Rezo para que el Altisimo bendiga a los palestinos con paz y bienestar"

El pontífice tuvo un gesto de cercanía con la población palestina, al enviar un saludo en un telegrama durante el sobrevuelo de su territorio. "Mientras sobrevuelo los territorios palestinos durante mi vuelo a Irak, extiendo mis saludos cordiales a su excelencia (el presidente, Mahmud Abás) y todos sus queridos ciudadanos", dijo Francisco en el telegrama enviado a las autoridades palestinas. "Rezo para que el Altisimo bendiga a los palestinos con paz y bienestar", añadió el papa en el texto.

Irak refuerza seguridad y decora Bagdad

Las autoridades iraquíes han intensificado las medidas de seguridad para asegurar que la visita del papa Francisco se lleve a cabo sin ningún problema.

Miles de efectivos de seguridad del Ministerio de Interior y de Defensa, así como de Inteligencia y Seguridad Nacional se han desplegado ya en todos los lugares a los que el Papa va a acudir, así como en las rutas por las que pasará y sus alrededores para que no haya ninguna brecha de seguridad que pueda enturbiar la visita, indicó hoy a Efe una fuente del Ministerio de Interior iraquí, que pidió el anonimato.

La Comandancia de Operaciones Conjuntas iraquí se ha coordinado también con las autoridades de la región del Kurdistán iraquí para tratar este "acontecimiento histórico" al máximo nivel en cuanto a medidas de seguridad, apuntó la fuente.

Asimismo, aseveró que habrá operaciones de vigilancia durante las 24 horas del día por aviones no tripulados en todos los lugares en los que el Papa estará en su primer viaje apostólico desde el inicio de la pandemia del coronavirus.

Irak refuerza seguridad y decora Bagdad ante la llegada histórica del Papa. EFE

Antes del desplazamiento, el pontífice argentino, que visitará la capital Bagdad, Mosul, Erbil, Qaraqosh y Ur de los Caldeos, pidió oraciones para que "este viaje pueda ir bien" y se "haga de la mejor manera".

Con los preparativos de seguridad ya terminados y con refuerzos adicionales en las provincias de Di Qar, donde ha habido violentas protestas en las últimas semanas, y en Nínive, cuya capital es Mosul y que fue la capital de facto del grupo yihadista Estado Islámico (EI) desde 2014 a 2017, Irak ha agradecido en los últimos días la visita del Papa a un país devastado por la guerra y las múltiples crisis.

"Nosotros, el pueblo iraquí y el Gobierno, estamos esperando darle la bienvenida a su Santidad el papa Francisco. Mesopotamia ha sido y siempre será un encuentro histórico para los valores humanos comunes. Bienvenido, @Pontifex, a la tierra de Sumeria, Babilonia, Asiria y la tierra de los Profetas y civilizaciones", tuiteó anoche el primer ministro iraquí, Mustafá al Kazemi.

La capital Bagdad ha aprovechado la visita del pontífice para pintar los muros de algunas de sus calles y adornar las iglesias con imágenes y banderas del Papa, informó la agencia oficial de noticias iraquí INA.

Uno de los objetivos principales del viaje del Papa es recordar al pueblo cristiano que tuvo que huir por la persecución del EI en Irak y saludar a aquellos que permanecen en el país.

Entre los lugares que visitará el Papa en estos tres días figura Ur, donde nació Abraham, profeta de las tres grandes religiones monoteístas, y donde Francisco celebrará un encuentro interreligioso.

Además, el pontífice se reunirá mañana, sábado, con el gran ayatolá Ali al Sistani, uno de los principales líderes de los chiíes en todo el mundo, en un encuentro de enorme trascendencia para el diálogo entre religiones.

La cuestión de seguridad en todos estos lugares está en el punto de mira por los diferentes ataques que ha habido por parte de grupos contra instalaciones vitales en el país, incluidos aeropuertos y bases aéreas.