Los profesores de todos los cursos educativos y los estudiantes universitarios de Italia deberán contar con el certificado sanitario de la COVID-19 a partir del próximo septiembre, según acordó hoy el Gobierno en el Consejo de Ministros.

"La elección del Gobierno es apostar por el certificado para evitar cierres y proteger la libertad", explicó el ministro de Sanidad, Roberto Speranza, tras el Consejo de Ministros que aprobó por unanimidad este decreto ley.

El certificado, que demuestra haber recibido al menos una dosis de la vacuna, haber pasado la enfermedad o tener una test negativo, será obligatorio a partir de este viernes para consumir dentro de bares y restaurantes y para acceder a cines, gimnasios o grandes eventos.