Ahora empiezo a entender los comunicados que piden la salida de prisión de Zaplana por la enfermedad que padece, ya que el expresidente de la Comunitat Valenciana fue sometido a un trasplante de médula en 2015 y cada 15 días es trasladado al hospital desde la cárcel de Picassent para recibir tratamiento por lo que se pide dignidad y que pueda estar en su casa con sus familiares. Pues parece ser que el Govern de la Generalitat catalana ha decidido a blindar la figura del expresident, en cuanto a sus medios económicos pero también los medios materiales y personales, algo que tiene que ver con la enfermedad que sufre el expresident Pasqual Maragall. Así, el gabinete de Torra ha acordado en el Consell Executiu autorizar a los departamentos de la Generalitat «realizar las actuaciones que correspondan para garantizar a los expresidentes la atención y el apoyo que necesiten que les asegure su derecho a vivir dignamente, durante todas las etapas de la vida y no sólo los derechos económicos que deberían disponer de acuerdo con su estatus». De hecho, esta protección económica ya está prevista por la ley Por todo ello sería injusto que si todos los españoles somos iguales ante la ley haya este tipo de diferencias por ser otra región, tal como está pasando con los impuestos.