Sigue la maldición del Levante UD. Un partido más fue incapaz de ganar un partido en el que claramente fue de más a menos y sumó un punto que es un botín pobre teniendo en cuenta que el Leganés acabó jugando con diez hombres. Los de Muñiz se muestran ansiosos y bloqueados y sigue perdiendo la posibilidad de ganar a equipos de su liga en el Ciutat de València.
El Levante comenzó a un buen nivel recordando al de los primeros partidos de la temporada. Salió decidido a por la victoria y embotelló al Leganés. Lerma pudo marcar en el minuto 6 y en el 7 Campaña, de cabeza, estuvo a punto de adelantar a su equipo, pero el balón se fue por encima del larguero. Fueron buenos 15 minutos en los que de los que Muñiz no fueron capaces de marcar mientras el Leganés, poco a poco, iban despertando. El Zhar, Emrabat y Gumbau también pudieron marcar. En los últimos minutos el Levante otra vez se hizo el ánimo y se volvió a acercarse al área pepinera y en una de esas llegadas Ünal fue agarrado por Ezequiel, penalti que el colegiado se tragó ante la indignación de la grada.
Tras el descanso, el Levante comenzó a desquiciarse con las decisiones de Jaime Latre. Los azulgrana estaba más pendiente del árbitro y el Leganés comenzó a mandar sobre el césped. Muñiz echó mano de Bardhi en un intento de dar criterio al juego de un Levante muy impreciso.
En el minuto 67 el Leganés se quedó con diez jugadores por la expulsión de Emrabat al ver la segunda tarjeta amarilla. El equipo madrileño perdía a uno de sus mejores hombres.
El Levante puso más pólvora e Ivi y Mesa sal¡eron en sustitución de Pedro López y Campaña. Pero el Levante no llegaba con claridad pese a tener superioridad numérica. La ansiedad le podía y le desquiciaba la actuación de un colegiado muy permisivo con las malas artes del Leganés. Otro partido sin ganar en casa.
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