El Levante UD afronta hoy un desafío estimulante: eliminar al Barcelona de la Copa del Rey y clasificarse para los octavos de final. El resto es mayúsculo desde el día que el sorteo emparejó a ambos equipos, pero la ventaja adquirida en la ida por los granotes (2-1) ha llevado el choque de esta noche a otra dimensión. La de un partido que el Barça necesita ganar (si es por la mínima no le serviría si el Levante UD marcase 2 goles o más). La victoria del Levante UD en Orriols, que bien pudo ser un 2-0 si Coke no comete penalti sobre Denis Suárez en el tramo final, obliga a Valverde a sacar al campo a, al menos, varios de los primeros espadas. No lo hizo en el Ciutat de València y lo pagó caro. El Txingurri tiene un dilema: ¿Otorga la oportunidad de recuperar su imagen a los jugadores que formaron la alineación de aquel partido o apuesta por Leo Messi y todos los pesos pesados para asegurar la remontada y el pase a cuartos de final?

Lo más probable, según se desprende del entorno del Barcelona, es que Valverde opte por una solución intermedia. Sabe que los mismos que consideran que la Copa es un torneo menor son los mismos que afilarían las hachas en cuanto el Barça cayera eliminado.

Paco López tampoco saldrá con la alineación modelo de la Liga, pero sí con una mayoría de futbolistas habitualmente titulares. Sabe que tiene una oportunidad y no quiere tirarla a la basura antes del encuentro. El técnico, que tiene la baja de Chema, ha dado descanso a Roger, Rochina y Vukcevic y no convocó a Luna por decisión técnica.

Paco López podría repetir con Moses Simon como lateral izquierdo, con la presencia de Rober, Coke y Postigo en el eje de la zaga. José Campaña acompañará, en principio, a Prcic y Doukouré en el centro del campo. Con la ausencia de Roger en la convocatoria, Paco López podría juntar, de nuevo, a Borja Mayoral y Boateng como la pareja de ataque. O bien apostar directamente por Morales, el elemento idóneo para jugar al contragolpe.