El hombre de 41 años que se encontraba en las obras del TRAM y falleció el sábado en Calp al precipitarse desde 25 metros mientras caminaba por las inmediaciones del puente del Mascarat, cayó a una fosa cuando realizaba fotografías de la obra. Las hacía para la empresa Taludia, especializada en trabajos de altura y subcontratada por Ferrocarrils de la Generalitat para instalar un sistema de monitorización en la centenaria infraestructura.

La FGV ha confirmado que la víctima mortal estaba tomando imágenes con su cámara cuando, todo hace indicar, perdió pie, resbaló y cayó desde el puente, que está construido a 45 metros de altura. La compañía utiliza las instantáneas que toma durante sus tareas para ilustrar la web de la compañía, en la que muestran detalladamente los encargos que acometen, la mayoría en la Comunidad, para promocionar su negocio y captar la atención de los clientes.

El Consorcio Provincial de Bomberos de la Diputación de Alicante informó el sábado de que el accidente laboral se produjo a media mañana en el Poble Mascarat y que la víctima cayó a una fosa. Los bomberos trasladaron al siniestrado en helicóptero hasta el campo de tiro de Calp, donde se produjo el levantamiento del cadáver por parte de la autoridad judicial. Fuentes de la Guardia Civil confirman que la fosa a la que cayó el trabajador, de nacionalidad española, tiene entre 50 a 60 metros de profundidad.

Los trabajos previstos para el domingo fueron suspendidos de inmediato, según han indicado desde FGV, que ha trasladado ya sus condolencias a la familia del fallecido. En principio, Ferrocarrils de la Generalitat, que aprovecha los días no laborales para acometer los cortes en sus tramos, no ha confirmado si, tras el accidente mortal, retomará la tarea el sábado. Lo que sí ha asegurado es que será Taludia Cooperativa quien continúe con la tarea.