Los augures, que pronostican desde hace tiempo que el nuevo pabellón polideportivo frente al cementerio del Port de Sagunt nunca se acabará, se llenan de razón con cada nuevo obstáculo que aparece en el horizonte de una instalación que fue proyectada hace una década, se ejecutó parcialmente y sus obras llevan un lustro paralizadas.

Después de la insuficiencia presupuestaria y la temeridad de la oferta de la última empresa adjudicataria, que renunció con el contrato ya firmado, el Ayuntamiento de Sagunt ha modificado el proyecto para incorporar 700.000 euros más al pabellón, aunque todavía no puede sacar el contrato a concurso hasta que obtenga el préstamo previsto para este año.

El edil de Contratación, Pepe Gil, explica a Levante-EMV sobre los plazos en marcha que «el crédito no lo podemos pedir hasta que se cierren las cuentas de 2018, que será a finales de febrero». Entonces es cuando se podrá abrir el nuevo procedimiento de contratación, mientras se acerca el último plazo dado por la Generalitat, 31 de diciembre de 2020, para acabar con esta actuación del Plan Camps.