La Escola d' Estiu de Sagunt finalizó el pasado viernes «cumpliendo las expectativas planteadas y con los protocolos de seguridad por la Covid-19», como destacaron ayer desde el ayuntamiento en un comunicado, donde se destacaba el servicio prestado a 200 niños y niñas de 3 a 12 años.

Para cubrir esa demanda, el departamento contó con un total de 64 monitores de tiempo libre además de 21 monitores en prácticas.

En la realización de la actual edición, no faltaron cambios excepcionales provocados por la COVID-19. A diferencia de otras ediciones, este año solo se ofreció l'Escola d'Estiu completa, no por semanas o quincenas, y no se pudo ofrecer servicio de comedor. Tampoco se realizaron excursiones o desplazamientos con transporte público y comunitario, por lo que las actividades se realizaron en las sedes habilitadas. Además, se trabajó en coordinación con Salud Laboral y Sanidad Pública para establecer protocolos y medidas de protección y seguridad.

Desde la organización se destacaba que el equipo de monitores se ha dejado la piel mientras que las familias « han puesto todo su empeño desde el minuto cero en hacer fácil la travesía». Para trabajar toda la parte escénica del proyecto, el consistorio contrató a la compañçia local Camí de Nora; el centro Studio Pilates puso en marcha sesiones de baile y la empresa Ludobus fue la encargada de los grandes juegos realizados la última semana. Además, se contó con la colaboración de la empresa General drones, que organizó unas sesiones en la playa; el premio nacional de comic, Paco Roca, contó su aventura de 'El tesoro del cisne negro' y colaboró el youtuber Sergio Jurado ; todo bajo la coordinación de Txema Campos.