25 años de una prueba que va a más

La tradicional San Silvestre Porteña celebró su 25 aniversario con éxito de participación. Más de 2.100 personas se dieron cita en la última carrera del año que ya es famosa por ser una marcha para todos los públicos en la que los mejores disfraces tienen premio.

El presidente del CD Morvedre, club organizador, hace un balance positivo de la edición y cuenta que: «En total repartimos unos 2100 dorsales, y entre personas que corrieron sin dorsal serían más de 2.500».

«El balance es muy positivo y mucho más después de los años de pandemia. La participación de la San Silvestre es muy familiar, pero cada vez llegamos a más personas y más este año que hemos tenido zona de animación y hemos hecho ver que es una carrera que puede hacer todo el mundo, incluso andando, disfrazados o no», añade Cepedal.

En esta tradicional carrera, no solo tienen premio los más rápidos, sino los disfraces más originales. Concretamente, Cepedal destaca de esta 25 edición ‘en individual el disfraz de leñador que se ha hecho conocido como el Forest Gump de la Maratón de València. Tuvimos el honor de que corriera también nuestra San Silvestre y ganó el premio en esta categoría’.

En cuanto a los disfraces colectivos, el presidente del club cuenta que el primer premio se lo llevó el grupo que representó «la lluvia de estrellas de la felicidad, estaba muy elaborado al igual que los quesitos. Estamos muy satisfechos porque hemos notado que la gente cada vez se prepara más los disfraces’».

En cuanto a los más rápidos, también hubo gran variedad de premios tal y como indica el presidente del CD Morvedre: «Para mí cada edición vamos a mejor y este año además de dar premios a los ganadores de categoría absoluta, también lo hemos hecho a las sub 14 y 16 y en categoría de diversidad funcional. Hecho que ha significado que se tripliquen las cifras en personas con diversidad funcional que participan».

La plaza del Sol se convirtió en una gran fiesta con la ambientación a cargo del speaker Javier Teruel, que también participó en la ambientación de la Maratón de València, como cuenta Carlos Cepedal: ‘Tenerlo es un lujo para nosotros, ya que te da ese impulso que necesitas antes de llegar a la meta’. Pero no solo hubo speaker, la San Silvestre también contó con la batukada del Colegio público Vilamar de la mano de su profesor de música Jorge y más de 30 alumnos del centro porteño.

Desde el club se obsequió a todos los niños participantes en la marcha con una medalla y el presidente se muestra orgulloso al informar que «se ha duplicado la recogida de alimentos para el Banco de Alimentos, no sabemos los kilos exactos pero calculamos unos 300/400. La parte solidaria se ha cumplido con creces».

Agradecimiento

Cepedal concluye con un mensaje de agradecimiento: «Solo podemos hacer una valoración positiva por la participación, la ayuda del departamento municipal de Deportes, y especial de Javier Timón y la de nuestros socios, que colaboraron en todo momento en el buen desarrollo de la mítica carrera, también en el montaje y desmontaje y los cortes de tráfico».