El piloto murciano Pedro Acosta, de 18 años, oficial del equipo KTM de Moto2 y uno de los más brillantes jóvenes del Mundial de motociclismo, está viajando hacia Barcelona después de fracturarse, hoy mismo, el fémur izquierdo, mientras se entrenaba practicando motocross, dos días antes de viajar rumbo a Amsterdam para trasladarse, inmediatemente, a Assen, la 'catedral' del motociclismo, para participar en el Gran Premio de los Países Bajos, 11ª carrera de la temporada, con la que se cierra la primera parte de la temporada y empieza, tras la suspensión del Gran Premio de Finlandia, que debía celebrarse el próximo 11 de junio, un mes largo de vacaciones para todo el mundo.
Operación inmediata
Acosta, que será intervenido por los médicos que habitualmente asisten a los pilotos en el Mundial de motociclismo y pertenecen al Institut Dexeus Quirón, de Barcelona, se encuentra muy afectado por el percance, pese a saber que son cosas que ocurren habitualmente a todos los pilotos, incapaces de dejar de entrenarse con dureza y profesionalidad, incluso cuando dos grandes premios están tan juntos en el calendario como ha ocurrido, en esta ocasión, con las carreras de Sachsenring, el pasado domingo, y la del domingo que viene en Assen.
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Acosta había vuelto
Varios pilotos han preferido quedarse en Alemania o ir viajando, poco a poco, a los Países Bajos, aunque la inmensa mayoría de ellos han regresado a España para seguir entrenándose lunes, martes y miércoles y aparecer, el próximo jueves, en el mítico circuito holandés. Acosta, que había tenido un inicio de Mundial de Moto2 muy irregular, se había mostrado ya muy, muy, recuperado ("hemos vuelto", dijo al ganar en Mugello, su primer gran premio de esta temporada y de la categoría de Moto2) y figura ya en octava posición del Mundial, aunque todavía lejos de la cabeza.