El color, la música y la espectacularidad de las escuadras de Moros y Cristianos llenarán las calles del municipio alicantino de Monforte del Cid entre el 5 y el 9 de diciembre. Estas fiestas con más de dos siglos de historia llegan puntuales -en fecha atípica respecto a la mayoría de fiestas de la Comunitat Valenciana- a su cita en el calendario en un año trascendental para ellas, ya que la fiesta busca conseguir la denominación como Fiesta de Interés Turístico Autonómico en el año 2024.
Los festejos, concebidos de forma similar a la actualidad, tienen más de 200 años de historia, cuando la Purísima pasó a ser la patrona de la localidad, pero sus raíces se remontan a la Edad Media y a los alardos de pólvora de la procesión de San Jaime, el antiguo patrón de Monforte del Cid, del siglo XVI. Por eso, desde el ayuntamiento, “nos hemos comprometido para darles la distinción que merecen y aspiramos a equipararnos a otras fiestas de Moros y Cristianos de la Comunitat Valenciana”, expresa su alcalde Juan José Hernández. Para los monfortinos, “son los días más importantes del año”. Para el primer edil, las fiestas “son familia, un entorno de alegría, calma y paz. Es familia la de sangre, pero también lo es la que formamos con el paso de los años, a veces bajo el manto de la amistad e incluso con el nombre de Escuadra”.
Por su parte, el concejal de Fiestas, Pascual Jesús Abad, quiere alentar “a cualquier monfortino y monfortina a aprovechar al máximo estos días y que compartan momentos con la familia y amigos”. Y, además, extiende una “cálida bienvenida a cualquier visitante que decida unirse a unas Fiestas de Moros y Cristianos llenas de tradición con más de dos siglos de historia”.
Contrabandistas, una singularidad
Una de las particularidades de las fiestas de Moros y Cristianos de Monforte del Cid es que, además de los tradicionales bandos de la media luna y la cruz, cuentan con un tercer colectivo: el de los contrabandistas; una comparsa que destaca por sus trajes de carácter andaluz y por el malabarismo ejecutado por sus cabos de las clásicas navajas y su acento distintivo a la hora de declamar su embajada. Sus más de 500 integrantes representan a los lázaros que desafiaron a los cristianos antes de la invasión mora.
Otra de las singularidades de los festejos es el libro de fiestas, una publicación con más de un siglo de historia. El primero de ellos se publicó en 1922 con una tirada de 500 ejemplares y la revista no ha faltado nunca a su cita, ni siquiera en el año 2020, cuando el mundo estaba sumergido en una pandemia.
Las fiestas de Moros y Cristianos involucran a toda la localidad - su censo es de 8.780 habitantes según su estadística actual -, ya que más de un millar de monfortinos y monfortinas, 1.118 concretamente, participan en los desfiles y en la fiesta activamente.
Se celebran en diciembre, fecha atípica para una fiesta de este tipo. “Es inusual para la mayoría de los municipios, ya que tradicionalmente no suelen llevarse a cabo en este período del año -, explica la concejala de Turismo, Maribel de las Nieves -. Como hay dos días festivos durante las fiestas, esto ofrece la oportunidad de que visitantes de otros municipios puedan venir, conocer nuestras fiestas y enamorarse de ellas”.
Una fiesta con más de dos siglos de historia
Los festejos de Moros y Cristianos se remontan a la Edad Media -se ha citado anteriormente – y han ido creciendo en importancia y duración con el paso de los años. Al principio se alargaban entre dos o tres días frente a las cinco jornadas festivas actuales. En esa época, el acto culminante de las fiestas eran las “soldadescas”, unos desfiles de arcabuceros con capitanes incluidos acompañados por bandas de música, que fueron evolucionando hasta los desfiles actuales.
La primera evidencia documental de las fiestas de Moros y Cristianos de Monforte del Cid se remonta al año 1769, concretamente al 8 de diciembre, festividad de la Purísima, aunque no se le denominó como Fiesta de Moros y Cristianos hasta el año 1881. Sin embargo, su consolidación definitiva se produjo en 1968 con la fundación de sus tres comparsas: Comparsa Cristianos, Comparsa Moros y Comparsa Contrabandistas.
Principales actos
El programa de festejos es muy amplio con varios desfiles, pasacalles, ofrenda de flores, arengas y embajadas. Sin embargo, uno de los actos más emblemáticos de las fiestas son las embajadas, cuyos primeros registros datan del siglo XIX.
El papel de los embajadores es una parte muy importante de este acto, quienes realizan “una labor titánica” porque, durante meses, realizan un trabajo por “memorizar el texto específicos, perfeccionar los gestos y dominar los acentos” para dar vida a una representación “única capaz de emocionar a tanta gente”, explica el edil de Fiestas, Pascual Jesús Abad, quien lo ha vivido en primera persona hasta en tres ocasiones al encarnar al embajador moro, la última vez en el año 2018.
Las embajadas tienen lugar los días 7 y 8 de diciembre, alrededor del emblemático castillo festero, donde los embajadores declaman sus textos frente a una audiencia de más de 1.500 personas. El día 7 de diciembre se celebran las embajadas de los Contrabandistas, a las 13.30 horas, y la Mora, a las 17.30 horas. Un día más tarde, el 8 de diciembre también a las 17.30 horas, es el turno de la embajada Cristiana.
Otro de los momentos más esperados es el del pregón de fiestas, el sábado 2 de diciembre. En esta ocasión, correrá a cargo la familia Miralles-Gutiérrez por su gran implicación en la fiesta. Son “los candidatos ideales para representarnos”, asegura el alcalde de Monforte del Cid. Lo son por “su dedicación y pasión por las fiestas” porque, “no importan las adversidades, desfilan con alegría al llevar sus trajes cada año y siempre lo hacen con una sonrisa en sus caras”. Y es que José Miralles Gutiérrez, conocido en la localidad como Pepe, nació en el año 2000 con una parálisis cerebral; sin embargo, su implicación y la de sus padres con Monforte del Cid, hacen que sea una persona muy querida por todos los vecinos de la localidad.
En los últimos años, las fiestas de Moros y Cristianos de Monforte del Cid se han internacionalizado y turistas provenientes de Noruega, Alemania o América llegan expresamente para vivir los festejos.
En esta línea, el Ayuntamiento de Monforte del Cid quiere hacer un llamamiento a los valencianos y valencianas, además de a turistas nacionales e internacionales, para que visiten esta fiesta que, en el año 2024, aspira a conseguir el reconocimiento de Fiesta de Interés Turístico Autonómico.
