En la Europa del siglo XIX, obsesionada por la búsqueda del placer, los mousses causaron furor, especialmente los de frutas —cerezas, ciruelas, melocotones o peras —que fueron muy solicitados por las elegantes damas de la belle epoque.

Mousse helado de frutas

Así se prepara:

Los melocotones y las peras se pelan y se les quitan los huesos y semillas, y las fresas se lavan. Todo junto se pasa por la batidora y después por un pasapurés fino. Esta mezcla se une con el almíbar a punto de hebra fuerte —cuando esté frío—; se agrega también el licor y la nata y se remueve bien.

Cuando esté bien mezclado, se vierte el preparado en una fuente de cristal, o en varias individuales, y se introduce en el congelador durante dos horas. Se sirve muy frío.

Ingredientes para 6 personas:

1/2 kg de melocotones o albaricoques, 1/4 kg de fresas, 1/4 kg de peras o ciruelas, 1/4 litro de almíbar fuerte, 1 copa de kirsch, 250 g de nata montada.