Un balcón al mar en plena playa de Pinedo. Eso es el restaurante La Ferrera, un templo para los amantes del arroz que, debido a su ubicación a escasos metros de la playa, lo han convertido en un icono de la costa valenciana.
Su cercanía con el centro de València, además, le permite recibir cada día a numerosos visitantes que se desplazan hasta Pinedo desde la capital del Túria para degustar su menú a lo largo de toda la semana. Así pues, este santuario de la cocina valenciana tradicional -y no tan tradicional- se ha erigido como uno de los mejores lugares para experimentar con arroces de toda la vida.
Innovar desde el respeto a las raíces
El espíritu de las raíces valencianas y la manera de cocinar ancestral se puede probar en cada plato de esta arrocería que apuesta por ofrecer un toque personal y una cuidada presentación en su cocina de marcado carácter mediterráneo, en la que los productos de proximidad, naturales y de alta calidad juegan un papel fundamental.
Su carta, además de variada -aunque siempre con el arroz en el centro- es perfecta para quienes desean degustar el sabor tradicional del arroz con un giro moderno y experimental. Su consolidada variedad incluye arroces de mar y de montaña, destacando los clásicos del ‘senyoret’, la paella valenciana y los más experimentales, como los de secreto ibérico, boletus y trufa, su arroz al horno de embutido, panceta curada y pasas cocido en calabaza con fondo de puchero valenciano o su ‘paella de la senyoreta’.
La Ferrera emana maestría arrocera y su búsqueda de los mejores productos de temporada y de proximidad siempre hace que sus arroces tengan ese toque familiar y exquisito que nace de la tradición de este mítico restaurante.
Un enclave único
Aunque los arroces sean los protagonistas de La Ferrera, su localización única y su ambiente etéreo hacen que comerse un arroz en sus terrazas sea una experiencia inigualable.
Así pues, los comensales disfrutarán de una deliciosa comida en un luminoso local reformado exquisitamente con pinceladas mediterráneas que hará que respiren la calma del mar mientras degustan los arroces tradicionales.
La luz y la calma del mediterráneo, gracias a su local en primera línea de playa, invitan a repetir la experiencia en La Ferrera. Además, si buscas descubrir planes nuevos y desconectar de la efervescencia de la ciudad, este restaurante es tu sitio.
