Eso es lo que reza el dicho popular -sobre todo en los pueblos de montaña norteños- cuando octubre se viste de blanco. Realmente, el refrán dice que «la luna de octubre siete lunas cubre; y si llueve, nueve», pero una de sus muchas variantes sostiene que «la nieve de octubre, siete meses (o lunas) cubre». Es profecía de que el invierno viene frío y rico en nieves, aunque eso está por ver. Pero es verdad que estamos ante un temporal muy notable. Nevadas como las de estos días son raras en octubre incluso en las zonas montañosas, porque las irrupciones de aire polar no suelen anticiparse al otoño. La prueba de que se trata de una situación anómala ha sido el frío diurno. En una jornada típica de octubre aún se superan los 20 grados en media España, pero ha habido zonas del Mediterráneo en las que la semana pasada y ésta los termómetros no han pasado de 16. Hoy, la borrasca se nos echa encima, y con ella el viento gobernará el temporal.