En 2018 se cumple el décimo aniversario del concierto de Cohen, «Live in London», un año antes de su visita a València. Cohen, canta a Lorca en, «Poetas en Nueva York», y, en el «Pequeño vals vienés» « Take this waltz», en la adaptación inglesa, Cohen, inunda con su poesía, arrolladora e íntima, el «Concert hall"s», vienés. Es Lorca, interpretado por un espíritu hebraico, conceptual y expresivo. Es Cohen en estado puro, poeta e intérprete, oscuro y profundo, difícil, pero siempre luminoso. Como sus palabras al recoger el Premio Príncipe de Asturias, 21 de octubre de 2011, «la poesía viene de un lugar que nadie domina y que nadie puede conquistar».

En la búsqueda de la libertad adolescente, como la del pájaro sobre el alambre, «Bird on the wire», Cohen, nos lleva de su mano. En, «The Partisan», la libertad pronto vendrá, «freedom soon will come», las fronteras son mi prisión, «the frontiers are my prison», y, en su francés natal - ¡cómo lo recuerdan en Montreal! - «mais j'ai tant d'amis, j'ai la France entière», tengo tantos amigos, la Francia entera. Cohen, siempre fue un canadiense errante, así en, «The lost canadien», recogió una composición tradicional sobre la lucha de sus antepasados en el Estado de Quebec, incluyendo una frase de las del himno oficial de Estado, «je me souviens», que a su vez puede leerse en las matrículas de todos los vehículos.

Imposible pasar por alto, aquellos primeros éxitos inolvidables como, «Chelsea Hotel», «So long, Marianne» o, «Suzanne», balada que recoge uno de los poemas del libro, «Los parásitos del cielo». Se trata de «Suzanne te lleva», «Suzanne takes you down». Te lleva a su casa junto al río, y tú aceptas viajar con ella, quieres viajar a ciegas, porque sabes que puede confiar en ti, que puedes confiar en ella, pues tocasteis vuestros cuerpos perfectos con el pensamiento.

Recientemente, se recuerda a Leonard Cohen, en estas mismas páginas de Levante-EMV, a través de un valioso análisis del libro de Sylvie Simmons, «Soy tu hombre», título de una hermosa composición de Cohen que da lugar al documental, «I'm your man», considerado por el director cinematográfico, Wim Wenders, como «uno de los mejores musicales de todos los tiempos».

Cohen, nos dejó su adiós al escribir, «You want it darker», su último disco, publicado el 21 de septiembre de 2016, al cumplir los 82 años. Fallecería un mes más tarde, el 21 de octubre de 2016. Ahora, su hijo Adam, en el prólogo de su libro póstumo «La llama», nos dice que a su padre solo lo mantenía vivo la poesía. En él recoge, la crítica de Leonard Cohen a Jay-Z, esposo de Beyoncé, «no es Dylan de nada, yo lo soy». Cohen admiraba a Bob Dylan, de quien diría, haciendo referencia a su poema, «There are some men», que hay hombres que debieran tener montañas para eternizar sus nombres en el tiempo, Dylan es uno de ellos. Otro es Cohen.