Quizá, cuando se publique este articulo, ya será público y notorio, que en las sesiones de la Cumbre Europea para alcanzar el acuerdo que incluya el fondo de recuperación con 500,000 millones de € en transferencias directas, y de los que presumiblemente uno de los países beneficiarios sera nuestro país, no se habrá alcanzado ningún acuerdo,y habrá que buscar fórmulas que desbloqueen la situación.

Las dificultades son muchas y muy complicadas para lograr el acuerdo satisfactorio que se necesita en Europa, y hay que reconocerlo de entrada junto al convencimiento de que habrá un acuerdo.

El estado de ánimo reflejado por el Presidente Pedro Sánchez, después de las conversaciones mantenidas en la Haya, Berlín, Suecia y París, para lograr convencimientos acerca del acuerdo, y que se ha expresado reconociendo que se tendrá que ceder en el acuerdo sobre el Fondo Europeo, permite pensar que alcanzar este, no va a ser tarea fácil y de rápida consecución. al menos, si no se modifican las actitudes de algunos dirigentes Europeos.

Que habrá finalmente un acuerdo, estoy convencido de ello, pero el problema por ahora, no va a ser tanto por las cantidades que se le concedan a nuestro país, sino por las condiciones para el pago que nos exijan, por el empleo que se nos pretenda imponer que se haga del dinero recibido, y en las determinadas reformas estructurales que nos quieran imponer determinados países.

El holandes Mark Rutte, ha manifestado: "Lo problemático para nosotros, es el volumen del Fondo y que sea en transferencias y no en créditos".

Incluso la posición del sueco, más flexible que el holandes, ha hecho saber que quiere que sean "Créditos y no transferencias".

Todas las delegaciones tienen pegas a la propuesta del Consejo, pero todas ellas son superables, y susceptibles de modificarse en el debate, salvo por ahora, la actitud del holandés Rutte, que amenaza con su veto a que se apruebe el acuerdo necesario del fondo de recuperación de Europa, contra las crisis si no se aceptan sus exigencias.

La clave para desatascar el bloqueo al acuerdo tiene dos posibles esperanzas. La primera es la actitud de la Angela Merkel , que no está de acuerdo con la exigencia de la unanimidad del holandes Mark Rutte, y apuesta por una mayoría reforzada que evitaría los vetos, aunque por otro lado, la alemana pide a italianos y españoles, que cedan en otras cuestiones para llegar al acuerdo , y sobre todo, que den garantías de las reformas estructurales que tienen pensadas.

La primera jornada de la Cumbre Europea celebrada el viernes 17 de julio, tuvo como era previsible, la figura del primer Ministro de Países Bajos , Rutte como el portaestandarte de las posiciones más exigentes.

Aunque de la impresión de que buena parte del Fondo se destine a subsidios, exige "garantías absolutas" sobre las reformas, a cambio de las multimillonarias ayudas.

"Una Europa, más fuerte, también significa que los países que se han quedado atrás, aceleren en reformas como las pensiones ó el mercado laboral", dijo Mark Rutte.

Pedro Sánchez , sin embargo consciente de que todos los países tienen que ceder en sus posiciones de entrada a la reunión del Consejo, ha considerado la voluntad reformista del gobierno español, pero rechaza obviamente que Holanda u otro país decida qué cambios tenemos que hacer en nuestro país.

La primera jornada del Consejo Europeo no ha servido para acercar posturas entre Norte y Sur sobre el Fondo de reconstrucción de 750,000 millones, pensados para auxiliar a Italia y España. Las diferencias entre Holanda y estos dos países, siguen siendo muy profundas y casi nadie ve un acuerdo próximo en Bruselas.

En estas circunstancias se celebrará la segunda sesión del Consejo, en busca del acuerdo para desbloquear el presupuesto y un fondo de reconstrucción, y que acuerde los detalles y condiciones.

El problema es que unos países llegamos más necesitados que otros, Italia y nuestro país, han sido los más vapuleados, por la crisis sanitaria, económica y social. Y nos urge que el grifo se abra lo antes posible. Holanda es el principal escollo junto a Austria, Suecia y Dinamarca, que quieren recortar los fondos y se oponen a inyectar dinero sin condiciones.

Que se siga exigiendo la unanimidad para aprobar los planes nacionales, poder vetar lo que no les convenza, va a conseguir que los debates se eternicen y el dinero no llegue a donde se necesita. Por esa razón, estoy convencido, de que habrá retrasos en su consecución, pero finalmente se lograra el acuerdo que se necesita en Europa.

La firmeza e inteligencia del Presidente Pedro Sánchez, van a ser un buen y útil instrumento para facilitar el debate y el entendimiento del Consejo Europeo. Porque sin ello, Europa no sería Europa. Y Europa será Europa.

Los países que no entiendan que no se trata de ayudar a los más necesitados, invadiendo las funciones de los Gobiernos, sino que hay que reconstruir Europa , van a tener un problema hasta que lo comprendan. Porque mientras que no haya la comprensión necesaria, las reuniones en busca de un acuerdo satisfactorio, pueden ser interminables .

Los países nórdicos no se resignan y siguen presionando para recortar el volumen de ayudas a España e Italia. Pero estos países o Francia consideran, que 750,000 millones es el mínimo imprescindible para que ese fondo tenga algún tipo de impacto positivo.

De esa cantidad, 500,000 millones se distribuirán en forma de subvenciones a fondo perdido, mientras que los otros 250,000 serán préstamos a devolver.

El objetivo de algunos países, es evitar sobrecargar a Italia y España, que ya tienen niveles de deuda muy elevados . Los nórdicos no están de acuerdo y piden que toda la ayuda sea en forma de créditos .Y el Gobierno de Pedro Sánchez quiere que la mayor parte del dineroi sea a fondo perdido, es decir, que no haya que devolverlo, pero esta idea cuenta con nel rechazo de buena parte de los Veintisiete.

Ese es el panorama en las primeras sesiones del Consejo Europeo, lo que permite vaticinar la continuidad de las negociaciones, hasta lograr el acuerdo corrigiendo todos los países, cediendo todos sus posiciones iniciales, sin imposiciones ni vetos, se logrará, como viene defendiendo nuestro Presidente Pedro Sánchez.

Yo, asi lo creo, y así lo digo, y así lo espero