Impiden su voz en los foros internacionales, ningunean sus métodos y descalifican a su gobierno. ¿Por qué? La respuesta viene avalada por estos datos: de los 25 millones de habitantes, un 43% es católico; desde el año 91 -fecha de inicio de una eficaz campaña de prevención- se ha pasado de un 15% de infectados a un 4%; y en los últimos siete años se ha conseguido disminuir el porcentaje de jóvenes promiscuos de un 60% a un 5%.

Estos datos objetivos lanzan un torpedo a la línea de flotación de los defensores del negocio de los preservativos, demuestran que los valores sociales de la fidelidad conyugal están en alza, y como no interesa su difusión los medios de comunicación los silencian, pero estos datos por si solos constituyen todo un grito silencioso.

¿Dónde reside la clave del éxito? Reside en el diseño de una campaña basada en tres opciones fundamentales y su posterior lanzamiento desde la esfera gubernamental: la estrategia del A, B, C. La A consiste en la abstinencia, especialmente entre los jóvenes. Con la B se postula la fidelidad y la monogamia , y para los que no han seguido las recomendaciones anteriores , y sólo para esos casos, el uso del condón o preservativo.

Las y los ugandeses han hecho caso a la Iglesia Católica que habla -y no sólo para los católicos- de cambios en el estilo de vida y aconseja la abstinencia y la fidelidad, no sólo como valores morales sino derivados del sentido común y de la necesidad de prevenir el sida: en los últimos 20 años han muerto 26 millones de afectados. Y años después, Uganda es un país con futuro porque sus jóvenes están sanos.

Otro dato esclarecedor: una supuesta reducción del sida con el condón en el 80% de los casos , sólo ha disminuido su incidencia de un 5% a un 1%, es decir casi nada . Y a cada campaña a favor del preservativo, le ha seguido un incremento en las enfermedades de transmisión sexual y en el número de embarazos en adolescentes.

¿Cómo podemos expandir esta verdad en el mundo entero y conseguir que los países más afectados -en su mayoría africanos- se convenzan de su realidad y urgencia? Seamos altavoz -cada uno en nuestro foro personal- y consigamos ser escuchados en los medios de comunicación. Es toda una tarea imponente y atractiva , que la humanidad nos agradecerá .

* Periodista.