La crisis ya crónica de la naranja ha provocado que el agricultor busque nuevos cultivos más rentables y el caqui se ha convertido en los últimos años en el que mayor crecimiento ha experimentado en la Ribera, aunque no es el único. El kiwi, la granada, el aguacate, la chirimoya, el mango o la platerina, una fruta de la familia del melocotón, son otros cultivos que el agricultor ha buscado como alternativa a los cítricos. Incluso algunos también se han atrevido con el arándano. j. g. cullera