Carcaixent vive unos momentos de tensa calma. Las brigadas siguen en la zona arrasada por las llamas realizando labores de extinción en un incendio que técnicamente se da por controlado. Ante el desolador panorama que ofrece el paraje tras haber perdido más del 80 % de la masa forestal, el alcalde de la localidad, Paco Salom, ha expresado que el «riesgo de incendio para Carcaixent aún es máximo y el peligro está más cerca de las personas».
Este municipio de la Ribera ha vivido unas jornadas muy duras en las que ha visto cómo un fuego se originaba en su término y quemaba más de 2.200 hectáreas. Aunque el incendio no ha provocado daños personales y las estructuras por las que se temía se han mantenido mayoritariamente intactas, en un futuro esta situación podría cambiar.
El alcalde de Carcaixent recalca que el riesgo de que la población sufra otro incendio sigue ahí. A pesar de que ahora existe una superficie mucho menor que podría ser pasto de las llamas, precisamente es una superficie que entraña un mayor peligro para la población. Según Salom, «la masa forestal que ha sobrevivido a esta catástrofe se encuentra muy cerca de las urbanizaciones y de zonas de población», explica el alcalde, a lo que añade: «Estamos hablando de que el peligro está ahora más cerca de las personas», sentencia.
En los mismos términos hipotéticos, el alcalde hace referencia a zonas específicas que podrían ser el foco de nuevos incendios: «Las zonas forestales que se han salvado del incendio cuentan con una serie de árboles y plantas que no se hallan calcinados por completo, se encuentran en un término medio entre estar quemadas y estar vivas, por lo que podrían ser el germen de un futuro incendio que tendría terribles consecuencias para la población ya que dejaría un margen de maniobra mucho menor y rápidamente podría afectar viviendas, chalés e infraestructuras del municipio», concluye Salom.
A pesar de que exista ese riesgo en el futuro, el director general de la Agencia de Seguridad y Respuesta ante las Emergencias de la Generalitat, José María Ángel pone la vista en el presente: «No hay que hablar de futuros incendios, hay que centrarse en los rebrotes que puedan haber ahora mismo por culpa de los tocones y las raíces incendiados y por eso seguiremos trabajando día tras día hasta dar este incendio por extinguido». Precisamente, en el día de ayer, las unidades que se encuentran en la zona sofocaron dos rebrotes que no pasaron a mayores.
Permisos para quemas agrícolas
Por su parte, los ayuntamientos de Alzira y la Barraca de Aguas Vivas realizaron ayer diversos llamamientos a sus vecinos que tienen que ver con la gestión de restos agrícolas. El consistorio alcireño aclaró que se seguirán concediendo permisos de quema personalizados hasta el 16 de julio para atender la gestión de la poda vinculada a las valencias, pero sólo en el caso de que el solicitante cuente con las medidas adecuadas de control y supeditado a que no se declare el día previso la alerta 3 de riesgo de incendio.
El ayuntamiento pidió prudencia con el uso del fuego por parte de los propietarios de campos que vayan a realizar quemas en los próximos días. La Barraca, a su vez, ha pedido a sus vecinos que mantengan despejados y abiertos los caminos para que se facilite el acceso de las brigadas en el caso de que fuera necesaria su actuación si se produjera algún rebrote.
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