La Policía Local de Alzira ha iniciado una campaña para revisar y comprobar la seguridad de los vehículos destinados al transporte escolar. Los agentes han realizado una serie de controles a los autobuses en los que se verificaba el correcto funcionamiento de todo tipo de elementos, desde cinturones hasta extintores.

En los controles se comprobó la adecuación de la documentación y autorizaciones tanto del vehículo como los requisitos especiales que deben de cumplir los conductores. También se verificaron las condiciones técnicas y elementos de seguridad del vehículo, concretamente el dispositivo luminoso con señal de emergencia, cinturones de seguridad o sistemas de retención infantil, tacógrafo, limitador de velocidad, apertura de todas las puertas desde el interior y desde el exterior, extintores o el botiquín de primeros auxilios.

Por último, se revisó la presencia de una persona acompañante, mayor de edad e idónea, distinta al conductor. Además de las mencionadas comprobaciones, todos los conductores se sometieron a la prueba de alcoholemia. Ninguno de ellos dio positivo.

La concejala de Seguridad, Sara Garés, insistió en la importancia de este tipo de campañas, «para asegurarse que las condiciones del vehículo y del conductor son las adecuadas» y recordó que nueve de cada diez lesiones infantiles graves o mortales podrían haberse evitado si hubieron utilizado dispositivos de seguridad adecuades.