Hugo está a días de ser devuelvo a Australia merced a las sentencias aprobadas en el Juzgado de Instrucción número 26 de Valencia y por la Audiencia Provincial, y que ya se encuentran en fase de ejecución. Según declaró ayer el abogado que han defendido al padre, «no cabe ningún tipo de recurso» ante la decisión de los tribunales españoles, que en las vistas orales celebradas del caso suscribieron que Silvia Ortiz había realizado una sustracción ilegal del menor al no volver con él a Australia al término del periodo temporal que se le aprobó para estar en España. «Se trata, en román paladino, de un secuestro», significó el abogado de la defensa del padre, destacando el hecho de que en sendas resoluciones judiciales se reconociese la retención ilícita que había realizado Silvia Ortiz sobre su hijo. «Y el padre de Hugo no ha hecho nada extraño, simplemente reclamar a su hijo con las sentencias en la mano», defendió.

El letrado apuntó además que en estos juicios los tribunales «han tenido en todo momento en cuenta el interés del menor», que plasmó el ministerio fiscal «con un informe contundente» que avalaba el traslado del menor a Australia. «La justicia no puede alcanzar una resolución como esta, en la que se lleva a un niño a otro país, sin haber verificado la situación en la que llegaría el menor», recalcó. Así, el padre tendría ahora mismo un visado renovado y válido para otros dos años en el país oceánico, que ha sido objeto de comprobación judicial, y que heredaría Hugo en cuanto volviese allí. Para la defensa del padre, este pasaporte es «significativo» respecto a la situación del padre allí: «Australia exige requisitos más firmes que Estados Unidos, por ejemplo, para dar el visado, y el padre lo ha estado renovando», valoró. Este punto de la defensa choca con la versión de la otra parte, de la madre, quien afirmaba que el permiso de estudiante del padre tenía una fecha de caducidad próxima y que Hugo se encontraría pronto en una situación irregular de ser devuelto a Australia.

Del mismo modo, el letrado huye de calificar el caso como «un conflicto de jurisprudencia» entre España y Australia. «Es muy simple, se ha aplicado la legislación del Convenio de la Haya, suscrita por ambos países». «No estamos hablando de Gambia», ahondó, «hablamos de unos países con leyes firmes, y que han coincidido en la valoración del caso». Una valoración que resuelve que se ha producido una retención irregular de Hugo y aprueba su devolución a Australia con su padre. La vuelta a su domicilio regular, donde el pequeño tiene arraigo, según la sentencia.

«Recuerda al caso Juana Rivas»

La defensa del padre criticó cómo Silvia Ortiz estaba «tratando de ganar por otros medios lo que no ha podido ganar en los tribunales», en referencia a la campaña de recogida de firmas que lanzó en Internet, que el letrado criticó. «Es un capítulo muy parecido al de Juana Rivas, con un recorrido idéntico aunque con menos peso mediático», comparó. En el caso de Rivas, condenada recientemente a cinco años de prisión por dos delitos de sustracción de menores, se escudó en una denuncia por maltrato contra su expareja „que ha sido desestimada, aunque la decisión está recurrida„ para justificar que huyese con sus dos hijos de 12 y 4 años en el verano de 2017.