Las pinturas rupestres de l'Abric Lambert de Cullera han permanecido ocultas desde la Edad de Bronce. Hoy ya son visitables. El ayuntamiento y Generalitat procedieron ayer a la apertura oficial de este enclave que desde 1998 es Patrimonio de la Humanidad como parte del Arte Rupestre Mediterráneo. El alcalde, Jordi Mayor, ha avanzado que promoverá nuevas investigaciones para descubrir si en l'Abric o en sus alrededores existen más muestras de arte rupestre, algo que los expertos creen bastante probable.

El arqueólogo y técnico municipal de Patrimonio Histórico, Kike Gandia, ha precisado que las pinturas rupestres «pertenecen al arte esquemático y forman escenas entre personas y las divinidades». El alcalde, Jordi Mayor, no dudó ayer en calificar el enclave como «una de las mayores riquezas patrimoniales de Cullera que, a su vez, «es la gran desconocida» por lo que su puesta en valor atraeá para vecinos y visitantes.

El control del Xúquer

L'Abric Lambert se sitúa en la montaña de Cullera, también conocida como la montaña del Oro, que forma parte de los relieves más meridionales del Sistema Ibérico. El abrigo se encuentra en una abertura rocosa que la erosión de los materiales calcáreos ha creado en sentido horizontal en la vertiente Oeste de la montaña. Se encuentra situado a 65 metros sobre el nivel del mar y se ubica en una posición dominante respecto al control del territorio y las llanuras de aluvión del Xúquer. El abrigo se emplaza muy cerca del poblado de Les Oliveretes.

La entrada al abrigo rocoso era extremadamente complicada. Hasta ahora debía hacerse a través de una parcela privada y prácticamente montaña a través, lo que impedía su visita en condiciones normales, el acceso de expertos para el estudio de las pinturas y su uso como elemento de dinamización turística. Todas estas dificultades se han superado ahora. La zona se ha acondicionado y se ha erigido una estructura de acceso peatonal mediante una escalera metálica. El arranque de la misma se situa en la calle Lloma dels Cabeçols.

En perfecto estado

Estas intervenciones han conseguido levantar muchas expectativas sobre el yacimniento arqueológico que dispone de un panel rocoso de alto interés. El abrigo rupestre se encuentra en un estado inmejorable. De hecho, recientemente y con motivo de una visita científica de los técnicos de patrimonio de la Dirección General de Cultura, se pudo constatar in situ que tanto las pinturas rupestres como el cerramiento perimetral, las consolidaciones efectuadas y los trabajos de protección frente a los agentes climáticos estaban en perfectas condiciones de conservación.