El Ayuntamiento de Turís recogerá durante los próximos días en sus oficinas alimentos de primera necesidad para repartirlos después, a través de Cáritas y El Rebost a familias necesitadas. Durante el estado de alarma sanitaria son muchas las familias que están pasándolo mal, a las cuales les falta la más básica de las cosas para poder sobrevivir, la comida.

El alcalde, Eugenio Fortaña, ha explicado esta medida como "una manera de facilitar la tarea del voluntariado que trabaja en El Rebost de la iglesia Evangélica y Cáritas parroquial, que durante estos días se ven desbordados por la gran cantidad de personas que acuden a ellos. Ofrecemos los bajos del ayuntamiento como un lugar de fácil acceso para toda la población, céntrico, y donde todo el mundo puede dejar alimentos no perecederos que repartiremos entre las dos entidades".

Pero la solidaridad vecinal no acaba ahí, puesto que el consistorio coordinan a un grupo de más de sesenta mujeres que, de manera voluntaria y con tela que ofrecen los comercios, confeccionan mascarillas que se reparten entre las tiendas que ofrecen productos de primera necesidad, el centro de salud y la Policía Local.

Dos tardes por semana también se coordina a cerca de cincuenta agricultores que salen por turnos con los atomizadores para desinfectar el casco urbano mientras la brigada municipal se encarga de las urbanizaciones del municipio. "Es impresionante y motivo de orgullo como, después de su jornada de trabajo, acuden a la cita para proteger a su vecindario. Realmente estamos viviendo muestras de solidaridad que nos describen como pueblo".

Además, y segun confirma el alcalde, en los últimos días varias asociaciones de todo tipo están ofreciendo la lejía que se utiliza para la desinfección, y locales de hostelería manifiestan su agradecimiento ofreciendo un aperitivo a los agricultores antes de salir con los tractores".