Levante-EMV

Levante-EMV

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Un derrumbe en el cementerio de Carcaixent destroza más de 20 nichos

El ayuntamiento está a la espera de una orden judicial que le permita actuar La estructura peligra

Columna de nichos afectada por el derrumbe, ayer. vicent m. pastor

El derrumbe se produjo el pasado fin de semana y no fue hasta la mañana del lunes cuando los operarios municipales se percataron de lo ocurrido. Al producirse en ese intervalo en el que el camposanto no se encontraba transitado, no hubo que lamentar daños personales. Los desperfectos materiales son enormes, por no hablar de la evidente afección emocional de las familias que se han visto afectadas.

Dos columnas completas de nichos se han desplomado y una tercera también ha sufrido las consecuencias del derrumbe. Entre veinte y treinta sepulturas se han podido ver afectadas por el incidente, según detallaron ayer a Levante-EMV fuentes municipales. Una enorme grieta figura ahora donde antes se encontraban los nichos. Todo hace indicar que el desplome se inició en la parte superior y las bóvedas interiores no soportaron el cada vez mayor peso, por lo que se hundieron.

Las sepulturas afectadas se localizan en la parte final del cementerio. Se edificaron hace unos cincuenta años y, precisamente, la técnica ejecutada en su construcción, con ladrillos antiguos y vigas de menor resistencia, podrían haber propiciado la fractura de una de éstas y el resto cayó por su propio peso.

Urgencia y respeto

Las mismas fuentes detallaron que hace unos días se detectó una pequeña grieta en la estructura. Los técnicos no observaron un problema de la magnitud que finalmente ha alcanzado. Entonces se consideró que lo más importante era mantener la vigilancia y retirar preventivamente las lápidas, que podrían caer si la afección se agravaba. Entonces se podría proceder a una reparación. Pero el consistorio ni siquiera tuvo tiempo material para ejecutar dicha acción. El desplome no entraba en ninguna de las previsiones.

Una valla perimetral protege ahora esta zona del cementerio ya que el consistorio todavía no ha podido ponerse manos a la obra, lo que no quita que se hayan realizado numerosas gestiones. Por un lado, pese a que el ruinoso estado en el que ha quedado la estructura dificulta su acceso, se ha elaborado un primer informe que constata su fragilidad y el peligro que supone. Tras ello, lo más importante es asegurar la zona para que no se produzcan más desperfectos.

Paralelamente, el ayuntamiento ha destinado a dos empleados municipales al rastreo de los familiares, una tarea más complicada de lo que parece ya que en más de una ocasión los titulares de los nichos han fallecido y/o su derecho ha cambiado de manos. Asimismo, dio parte de lo sucedido al Juzgado de Guardia para que dé las instrucciones a seguir. Lo más probable es que los restos de varias personas se hayan mezclado entre ellos y con los escombros. El consistorio sigue a la espera de una respuesta que le permita actuar con todas las garantías legales, con la urgencia y el respeto que el asunto requiere.

Compartir el artículo

stats