El colectivo La Ribera en Bici-Ecologistes en Acció ha solicitado al Ministerio de Política Energética que emita una declaración de impacto ambiental negativa al proyecto de construcción de una megacentral fotovoltaica que ocuparía cerca de 180 hectáreas en el término de Tous, según la estimación realizada por técnicos municipales, al considerar que el emplazamiento de esta planta «supondría la muerte» del parque natural de les Coves del Truig, un paraje ubicado en el término de Benimodo que suele estar muy concurrido los fines de semana; resulta incompatible con las normas urbanísticas que actualmente rigen en Tous o porque afecta a un sector declarado vulnerable por nitratos, una afección que, argumenta el grupo, «debe excluir cualquier tipo de actividad».
La empresa Falck Renewables Power 2 tramita la obtención de autorizaciones administrativas y la declaración de impacto ambiental para construir dos grandes centrales, una en El Realenc de Carcaixent denominada «Campos Salados» y una segunda en Tous bajo el epígrafe «Campos del Turia» con una potencia de 80 MW cada una. Si bien la primera ha generado el rechazo del gobierno municipal, la de Tous cuenta con el beneplácito del ayuntamiento ante el anuncio de una inversión de 60,4 millones de euros.
El colectivo La Ribera en Bici-Ecologistes en Acció, no obstante, ha aprovechado la fase de exposición pública para cuestionar la viabilidad de un proyecto que buscará en la subestación de Alzira el punto de enganche a la red, por lo que la línea de evacuación cruzará los términos de l’Alcúdia, Guadassuar y Alzira.
Las alegaciones rebaten que se trate de un proyecto de utilidad pública o que el decreto del Consell para favorecer la instalación de plantas solares deba prevalecer sobre las normas urbanísticas de Tous. El primero establece que solo se considera incompatible el uso de instalación fotovoltaica cuando esté expresamente prohibido en el planeamiento urbanístico municipal mientras que los ecologistas señalan que si este uso no figura entre los compatibles es porque está prohibido y precisaría de una modificación puntal del PGOU o la tramitación de un plan especial que lo regule.
Por otra parte, alertan de los riesgos para la fauna de la zona, la afección a una parcela que forma parte de la Red de Protección Natura 2000 o el incremento de escorrentías que puede generar una instalación de placas solares de tal magnitud. Con todo, la alegaciones alertan del impacto sobre el parque natural de les Coves del Truig, donde además de los valores naturales se localiza un asentamiento de la Edad del Bronce.
Señalan la alternativa de ubicar los paneles sobre la autovía
Los ecologistas exponen en sus alegaciones que debería estudiarse una alternativa de impacto ambiental «prácticamente cero» consistente en situar las placas solares sobre infraestructuras ya construidas para evitar la destrucción de suelos «vivos y fértiles de campos o montañas» y, en este caso concreto, señalan que «podría aprovecharse la autovía A-7, que pasa a poca distancia y está marca cerca de la estación transformadora de Alzira» para instalar los paneles sobre su trazado. «Con unos 18 kilómetros de autovía bastaría para generar los 80 MW deseados», expone el grupo ecologistas, que apunta como otras posibles alternativas utilizar esta fórmula sobre la Acequia Real o el Canal Júcar-Turia.
