Un hombre de 34 años ha sido detenido como supuesto autor de la agresión con ácido que en julio pasado dejó ciego a un doctor en Física que fue atacado por error cuando estaba con dos amigos en la terraza de una cervecería de la plaza del Cedro, en Valencia. Al parecer, el ahora arrestado habría sido contratado por una mujer para vengarse de un hombre, y se equivocó de persona. La víctima, Juan Pablo, de 33 años, dedicado a la investigación científica desde que se licenció en Ciencias Físicas, sufre gravísimas secuelas que le han apartado por completo de su profesión. Agentes del grupo de Homicidios también han apresado tras una larga y compleja investigación a los dos supuestos cómplices que acompañaban al agresor aquella noche.
Los hechos sucedieron a las 22.45 horas del 18 de julio, cuando Juan Pablo y dos amigos más, también físicos como él, tomaban unas consumiciones en la terraza de un bar, en uno de los callejones peatonales de la plaza del Cedro. El agresor, que se cubría el rostro con una gorra negra, llegó hasta la mesa y, sin decir una sola palabra, arrojó el contenido del frasco a Juan Pablo a la cara, tras lo cual salió corriendo de nuevo hacia la plaza del Cedro.
Uno de los acompañantes de la víctima, al escuchar los desgarradores gritos de dolor de ésta, salió en persecución del atacante, a quien vio subir a un vehículo en el que le esperaban otros dos y que salió a toda velocidad hacia la calle Manuel Candela. El testigo pudo apuntar la matrícula, lo que ha sido fundamental para lograr identificar a los sospechosos, ya que pertenece a uno de los arrestados.
Juan Pablo fue evacuado de inmediato en una ambulancia del SAMU al Hospital Clínico. Pese a la rapidez de la intervención médica, el ácido ya había actuado sobre los tejidos blandos hasta dejarle secuelas gravísimas, entre ellas la ceguera total de un ojo y casi asoluta, del otro. Desde julio, ha sido sometido a varias intervenciones quirúrgicas y durante semanas tuvo que permanecer ingresado.
También el amigo y compañero de trabajo de la víctima que persiguió al asaltante precisó ayuda médica, dado que las salpicaduras le provocaron quemaduras en los brazos y en las piernas.
Reconocido por los testigos
Nada más producirse los hechos, el caso fue puesto en manos del grupo de Homicidios de la Jefatura Superior de Policía de Valencia, que iba a afrontar una compleja investigación, dado que iban a toparse con el peor escenario posible: la ausencia absoluta de vínculo entre víctima y autor.
Desde el primer momento quedó claro que ni Juan Pablo ni sus acompañantes tenían una sola tacha en sus vidas que explicase un ataque de estas características, así que sólo podía entenderse lo sucedido desde la perspectiva del error.
Gracias a la contribución del testigo y a otros elementos analizados en el lugar, los agentes fueron cerrando el círculo hasta llegar al presunto agresor y a los dos cómplices que le acompañaban.
El pasado martes, agentes del grupo de Homicidios detuvieron al supuesto autor material de la brutal agresión y a los otros dos presuntos implicados. Todos ellos prestaron declaración el martes por la tarde en dependencias policiales en presencia de sus letrados y, según ha podido saber Levante-EMV de fuentes de toda solvencia, el principal acusado habría sido reconocido por varias de las personas que estuvieron presentes en el ataque.
