Dos miembros de la tripulación de un crucero que hizo escala el pasado sábado en Valencia están en prisión desde el pasado lunes después de que la Policía Nacional les confiscase 16 kilos de cocaína que transportaban en el buque. La embarcación prosiguió viaje mientras los tripulantes, ambos de nacionalidad hondureña, se quedaron en los calabozos del recinto policial de Zapadores. Ésta es la primera vez que se detecta un caso de estas características detectado en Valencia.
Los presuntos traficantes, Noeli A. C. y Kevin Adony B. L. fueron apresados al bajar a tierra, después de que la embarcación atracase en el muelle de Poniente, en la zona del recinto portuario valenciano habilitada para los cruceros. Según la información a la que ha tenido acceso Levante-EMV, parte de la droga les fue intervenida cuando ya habían descendido del buque y el resto, al parecer, en el interior del mismo. El registro no ocasionó retrasos en las previsiones del crucero, ya que fue realizado en las horas en que estaba atracado y el pasaje disfrutaba de las excursiones programadas en Valencia.
Tras dar cuenta al capitán del barco, los dos detenidos por agentes de la Unidad de Drogas y Crimen Organizado (Udyco) de Valencia fueron llevados a Zapadores y el buque continuó viaje.
La Policía trata ahora de rastrear el origen de la droga, es decir, en qué puerto la recogieron y su destino final. Los dos presuntos traficantes fueron entregados el lunes por la mañana en el Juzgado de Guardia de detenidos de Valencia, funciones que ese día desarrollaba el juez de Instrucción número seis. El magistrado ordenó prisión provisional, comunicada y sin fianza, a petición de la Fiscalía, según confirmaron fuentes del Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJ-CV).
Dos casos en una semana
Esta misma semana se dio a conocer la detención en Málaga de un hombre y a una mujer argentinos, de 47 y 40 años respectivamente, por introducir cocaína en España viajando en cruceros como turistas. La Guardia Civil les aprehendió más de doce kilos de esta droga al apresarlos cuando el buque hizo escala en Málaga.
Los arrestados se desplazaban regularmente en avión hasta países sudamericanos en vuelos financiados por la organización para la que trabajaban y para regresar con la droga embarcaban como pasajeros en cruceros turísticos con escalas en diferentes puertos de la ruta Tenerife, Málaga, Valencia, Marsella (Francia) y Savona (Italia). En el punto de origen del crucero eran abastecidos con la cantidad de cocaína que debían transportar hasta el destino pactado, donde entregaban la droga a las personas designadas.
