El Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana ratificó este mismo año una condena de cinco años y medio de cárcel a otro pastor, en este caso de la Iglesia Pentecostal de una localidad de la Ribera, por abusos sexuales a una niña de catorce años. La sentencia consideraba probado que el condenado se aprovechó «de su condición de ministro de culto» para realizarle tocamientos a la menor en una zona contigua de la iglesia.