La Audiencia de València juzgó ayer a dos presuntos traficantes de droga, uno de los cuales tenía una selecta cartera de clientes a quienes llevaba cocaína a sus domicilios. Según relataron los agentes de la Policía Nacional en el juicio a preguntas de la Fiscalía, de las intervenciones telefónicas y los seguimientos a que fue sometido el presunto camello supieron de la cartera de clientes del sospechoso, entre los que había un político en activo, un periodista, varios abogados y hasta una funcionaria de un ayuntamiento, entre otros. Todo ellos recibían la cocaína en su domicilio, a los que se desplazaba el presunto traficante en motos que alquilaba.

La Policía Nacional, según la calificación fiscal leída ayer en el juicio, detuvo al principal encausado y a su presunto cómplice en febrero del año pasado —a un mes del confinamiento—, y se incautó de unos 400 gramos de cocaína muy adulterada —algunas partidas tenían una pureza de solo un 17 %—.

El cómplice aceptó ayer, durante el juicio, tres años y dos meses de prisión, mientras que para el principal inculpado la fiscal mantiene la solicitud inicial de cinco años de prisión, ya que no reconoció los hechos.