Dos naves industriales de la provincia de València ocultaban el mayor alijo de marihuana envasada encontrado hasta el momento tanto en el país como a nivel internacional. La red de tráfico de drogas desmantelada por la Guardia Civil en la llamada “Operación Jardines”, enviaba la marihuana al vacío por todo el territorio nacional, así como a Suiza, Holanda, Alemania y Bélgica, entre otros países, a través de un complejo entramado empresarial.
En total los investigadores del Instituto Armado han intervenido más de 32 toneladas de cogollos de marihuana, la mayor aprehensión de esta sustancia, según destacan fuentes de la Benemérita. De hecho, su equivalencia en plantas completas sería de aproximadamente 1.100.000 ejemplares.
Asimismo, se ha detenido a veinte personas, nueve hombres y once mujeres, de entre 20 y 59 años. Los arrestos se han producido tanto en la provincia de Valencia como en Toledo, Ciudad Real y Asturias, donde la organización tenía sus bases de operación desde las que controlaban todo el proceso de producción y distribución de la droga.
Primera investigación
La investigación comenzó con una inspección de la Guardia Civil en varias plantaciones de cáñamo industrial de Villacañas (Toledo). Los principales investigados poseían una empresa con la que adquirían las semillas. Una segunda, las transportaba y sembraba. Mientras que otra empresa se encargaba del cuidado, mantenimiento, recolecta y secado de los ejemplares.
Finalmente, la empresa inicial se encargaba de adquirir las plantas ya secas con los cogollos y las almacenaba en dos naves situadas en la provincia de Valencia. Desde ahí los detenidos procesaban el género, separando los cogollos y envasándolos al vacío en diferentes formatos para enviarlos tanto a lugares del territorio español como a países europeos, principalmente Suiza, Holanda, Alemania y Bélgica, según detallas estas mismas fuentes.
Segunda inspección
La segunda inspección tuvo lugar en la localidad de Almagro (Ciudad Real) durante el mes de octubre. Agentes de la UOPJ de Toledo descubrieron unas 37.000 plantas distribuidas en cuatro invernaderos y en proceso de secado. Las tres personas que se hallaban en el momento de la actuación fueron detenidas. En la nave, la Guardia Civil encontró también cuatro toneladas de picadura de marihuana almacenadas en varias sacas. El destino de toda la mercancía eran los dos almacenes de Valencia.
Es precisamente en la provincia valenciana donde la Guardia Civil ha intervenido el grueso duro de la operación. Un total de 30.530 kilos de cogollos, 20 kilos de polen -todo envasado al vacío-, 21.600 plantas en proceso de secado y 231.200 cajetillas de cogollos de marihuana. También se ha hallado documentación que acreditaba la existencia de varias plantaciones más, maquinaria para el procesado, elaboración y envasado, destacando sobre todo dos máquinas para la extracción del polen. En este registro han sido detenidas 15 personas.
Por último, la tercera y última fase de la explotación, ha consistido en una nueva inspección en Asturias. El análisis de las plantas que se encontraban allí también ha dado positivo en psicoactivo. 4.000 plantas han sido intervenidas y hay otros dos detenidos.
