Investigan la muerte de un joven hallado en el arcén de la A-3 en Buñol

El cuerpo presentaba signos de haber sido arrollado por un vehículo pesado, que no se detuvo

El joven fue encontrado muerto en la cuneta de la autovía A 3, a su paso por Buñol.

El joven fue encontrado muerto en la cuneta de la autovía A 3, a su paso por Buñol. / Levante-EMV

La Guardia Civil investiga la muerte de un joven , todavía por identificar, que fue encontrado abandonado en el arcén de la autovía A-3, a la altura de Buñol, la noche del pasado martes. El cadáver de esta persona presentaba signos evidentes de haber sido arrollado por un vehículo pesado, pero en el aire todavía están muchas cuestiones que las investigaciones de la Policía Judicial de la Guardia Civil Requena deberán aclarar.

Por un lado, el vehículo causante del atropello, al parecer un camión que hacía el trayecto hacia un polígono industrial de Silla, y que fue inspeccionado esa misma noche. Así como los motivos por los que éste no detuvo la marcha tras el arrollamiento. De igual modo, tampoco se sabe por el momento si este vehículo pesado arrolló a esta persona primero, o el fallecido ya se encontraba en la calzada cuando el vehículo le pasó por encima.

Otra de las incógnitas que se investigan son los motivos por los que esta persona se encontraba a esas horas de la noche en una autovía elevada, con las dificultades de acceso que tiene para cualquier tipo de peatón, poniendo en grave riesgo su propia integridad. Aunque inicialmente se barajó la posibilidad de que hubiera sido arrojado desde otro vehículo, al cierre de esta edición cobraba fuerza la hipótesis del suicidio.

En un primer momento se pensó que se trataba de un animal muerto en la cuneta tras recibir el aviso de un camionero

El aviso del hallazgo del cadáver se produjo minutos después de las 22.30 horas del martes cuando un camionero alertó de la presencia de un obstáculo en la carretera en el carril derecho, junto al arcén de la autovía A-3, sentido València, a pocos metros de la zona de frenada para camiones que hay justo antes de la cantera de Buñol. Ni siquiera se sabía con certeza que se tratara de una persona. De hecho, cuando las primeras patrullas de Tráfico acudieron al lugar se pensaba que era un animal muerto en la cuneta.

Los agentes comprobaron que eran restos humanos, al parecer de una persona joven, con signos evidentes de haber sido arrollada por un vehículo pesado. Rápidamente se alertó a la unidad de Atestados de la Guardia Civil, así como a agentes de la Policía Judicial de Requena.

El fallecido no portaba documentación alguna encima y solo llevaba un mechero y tabaco, aunque las labores para su identificación van por buen curso gracias a un tatuaje en el cuello del fallecido. Esto acota las posibilidades, aunque será el ADN el que confirme su identificación.

El forense realizó una primera inspección ocular del cadáver en el lugar y el cuerpo fue trasladado al Instituto de Medicina Legal de València, donde hoy se le realizará la autopsia.

El Juzgado de Instrucción número uno de Requena ha abierto diligencias por el fallecimiento a la espera de lo que determinen las investigaciones de la Guardia Civil y el resultado de la autopsia.