«Jaume y diez más» es uno de los lemas que recorrían ayer por el vestuario, ya que Nuno sólo garantiza la continuidad del cancerbero de Almenara en el once titular de esta noche respecto al que jugó en Gijón, aunque se parecerá bastante. Cuando el entrenador portugués apostó por él este verano, lo hizo siendo consecuente y de verdad, de ahí el contrato por tres temporadas que le firmaron? y una cláusula de rescisión de 30 millones de euros. A Jaume la operación le sirvió para ganar mucha confianza, no sólo fue un detalle verbal, sino un hecho que reafirmaba su progresión y la confianza depositada en él a pesar de la llegada del australiano Mathew Ryan.
A pesar de que en los tres primeros partidos oficiales del curso fue Yoel el elegido para estar en el banquillo, el técnico confiaba más en Jaume, de ahí que cuando ha tenido que apostar por uno de ellos para ser titular, fuera el meta de Almenara el elegido. Él nunca se vino abajo, en ningún momento desconfió, pero tenía claro que cuando le dieran la oportunidad debía responder con nota. Y en El Molinón dio su primer paso. Selló una actuación soberbia que dio mucho que hablar, se recordó su ascenso vertiginoso de Segunda B a la élite, pero él tiene los pies en el suelo. Lo que demostró frente al Sporting fue tener una gran capacidad competitiva. Uno de los aspectos que validaron la apuesta de Nuno fueron sus intervenciones, ya que si la temporada pasada el entrenador luso encumbró a Diego Alves fue porque «sumó» muchos puntos para el Valencia CF, como Jaume en Gijón. La única incógnita que había que despejar era ver cómo iba a competir en los partidos, porque en los entrenamientos ya demostró durante la pretemporada anterior que podía ser una apuesta segura. Y ha quedado despejada.
Jaume siempre lo da todo sobre el césped, tiene personalidad de mando, y el club, fijándole una cláusula de rescisión de 30 millones de euros, sólo diez menos que la de David De Gea en el Manchester United, le valora. Raro es que un club se acoja a su cláusula de rescisión para ficharle, pero el hecho de haberle colocado 30 millones de euros refleja la satisfacción que tiene el Valencia CF de tenerle en el equipo. Ahora llega para Jaume el momento más difícil, como es su confirmación bajo los palos. Él no tienen ninguna duda, de ahí que en las últimas horas, a pesar de los elogios que ha recibido, él prefiriera estar en un segundo plano, trabajando.
Esta noche ante el Zenit, Jaume tiene la oportunidad ante su público de reafirmarse bajo los palos, en lo que será su estreno en Mestalla con el primer equipo. El escenario se lo conoce al dedillo, ahora llega lo más difícil, como es mantener el nivel tan elevado. Otxotorena ha realizado un gran trabajo en los últimos días para prepararle y que esté a tope.
