Es un topicazo de aúpa, pero una verdad como un templo. El fútbol activo no tiene memoria. Basta que Jaume pifie un balón claro en un próximo partido „como pifia cualquier portero por consagrado que sea„ y los mismos que ahora lo idolatran saldrán con que es inexperto pero como los periodistas defienden a «los de la terreta», lo han encumbrado.
El fútbol no tiene memoria para bien, ni para mal. Entre el viernes y el sábado leí y escuché multitud de opiniones cargando contra Nuno por la decisión de dejar fuera a Negredo de la lista ante el Málaga. El éxito o fracaso de la decisión disciplinaria (en mi opinión acertada, y disciplinaria por más que Nuno se apresurase a desmentirlo) dependía únicamente de lo que hiciera el equipo.
Si el Málaga se hubiera llevado algo de Mestalla hoy bramaría contra Nuno hasta el palo de la bandera. Sin pararse a analizar si la decisión era la más conveniente o no. El componente pasional del mundo del balón hubiera sido tan descarnado contra el preparador portugués como ahora se encuentra adormecido tras la victoria.
Nadie se acordó durante el partido de Negredo. Después, tampoco. Y eso no es ni bueno, ni malo. Si no todo lo contrario. Es el fútbol.
El mismo fútbol sin memoria que ha olvidado todo lo que dio Parejo la temporada anterior (es evidente que no ha arrancado la temporada a ese nivel) y le pita por ejercer un derecho que le correspondía: el de la ejecución de un penalti.
A fuerza de repetir la estupidez supina de que los periodistas somos especialmente protectores con los jugadores de la tierra, algunos se la acaban por creer. Y miren, a mi no me gustó que Alcácer se enfadara con Parejo por no dejarle ejecutar el penalti y no celebrara el gol hasta que Gayà pasó por su lado y le dijo algo al oído. Mal, Paco. Y no será que un servidor no habrá dicho por activa y por pasiva que soy muy de Alcácer, pero si eso lo hace CR7, lo criticamos. Así que no puedo aplaudir la reacción del internacional.
A Paco le pudo el ansia por ver puerta. Y sí es verdad que el año pasado Parejo tuvo el detalle con un necesitado Negredo ante el Getafe en Mestalla (contra el Getafe en Madrid y para que lo tirara Rodrigo fue más cosa de Nuno). Pero la decisión final le corresponde al encargado de lanzar y decidió no hacerlo. Punto y final.
El día que Paco marque y Dani le asista, todo quedará sepultado en la noche de los tiempos.
Para bien o para mal, el fútbol no tiene memoria.
