El negocio de los aparcamientos en suelo público se desvaneció en plena crisis al mismo tiempo que las arcas de la conselleria de Sanidad entraban en la Unidad de Cuidados Intensivos. Hasta ese momento diferentes mercantiles luchaban por ganar los concursos de los aparcamientos de los hospitales, lugares donde el usuario -mayormente- no tiene más remedio que pasar por caja antes de ingresar, acudir a una consulta o visitar a un familiar. Era cuando el PP puso en marcha el negocio de la sanidad ("Construyendo Salud") y los sindicatos se levantaban en pie de guerra.

El hospital Arnau de Vilanova había sido un centro de extrarradio, rodeado de solares y huerta hasta que con los planes parciales de Beniferri quedó envuelto de complejos residenciales y rascacielos.

El complejo sanitario atiende a una población de 325.000 ciudadanos, lo que genera a diario un tráfico considerable. Las necesidades de aparcamiento en sus alrededores se han convertido en un quebradero de cabeza durante la última década. La conselleria anunció a bobo y platillo en 2005 que con cerca de 13 millones de euros construiría un aparcamiento para 1.000 coches y un helipuerto. El "parking" sería de gestión privada y la licitación la ganó la promotora Lubasa el 10 de agosto de 2006. Pero la obra no se hizo.

Retirada del cartel

Fue un espejismo. Ahora mismo ninguna constructora se arriesgaría a levantar un aparcamiento subterráneo en un contexto de recesión económica aunque la concesión fuera para cuarenta años. La solución de la conselleria de Sanitat fue un parche. Y nunca mejor dicho.

Hace un año el cartel del gran aparcamiento y del helipuerto desapareció misteriosamente del centro sanitario y en su lugar se puso el de la rehabilitación de varias plantas del hospital. En el solar utilizado como aparcamiento, repleto de agujeros y desniveles se usó zahorra y maquinaria pesada para con un suave asfaltado intentar adecentarlo. Con las primeras lluvias comenzaron los problemas. La parcela está por debajo del nivel de las calles y el aparcamiento se convierte en un laberinto de charcos y baches para los usuarios.

La situación es generalizada en los solares municipales que hay junto a la Iglesia de San Josemaría Escrivá de Balaguer. Descampados donde los coches aparcan como pueden bajo la tutela de grupos de "gorrillas" que controlan todas las plazas de estacionamiento de las inmediaciones del hospital. El sindicato Comisiones Obreras ha pedido varias veces a la conselleria de Sanitat que ordene y arregle el aparcamiento en superficie para mejorar los accesos al hospital. Un asfaltado de verdad con la señalización de calles, plazas y espacio para los peatones. De momento nada de nada. El Arnau de Vilanova emerge entre los edificios como si todavía estuviera por urbanizar la zona.

El Arnau desvía enfermos del corazón al Clínico y La Fe

El Hospital Arnau de Vilanova es algo así como el hermano pobre de los grandes hospitales de la ciudad de Valencia. O al menos así lo creen los representantes sindicales quienes vienen denunciando las deficiencias del centro en los últimos años. Comisiones Obreras (CC OO) ha criticado con dureza que sea "el único centro sanitario de la ciudad que carece de una sala de Hemodinámica y una de Cardiología Intervencionista" lo que en la práctica supone que los enfermos que precisen de estos servicios sean derivados a la Fe, al General, al Clínic o al Peset Alexandre.

El sindicato recuerda que "la cardiopatía isquémica es la principal causa de muerte en nuestro país y causa importantes ingresos hospitalarios tanto en las Unidades de Cuidados Intensivos (UCI) como en las salas de cardiología". En el Arnau los pacientes con Síndrome Coronario Agudo tienen que ser derivados a otros centro porque dispone de pocas camas en la UCI. Los enfermos ingresados en el Arnau tienen que esperar para poder ser remitidos a otro hospital en el que le practiquen el cateterismo.

"La actitud de la conselleria de Sanitat muestra que no existe la más mínima intención de incorporar la Hemodinámica en el Hospital Arnau de Vilanova. Los argumentos esgrimidos son que no hay Servicio de Cirugía Cardíaca" señalan desde CCOO. Un dato que no es una buena excusa para el sindicato puesto que "tanto en el Hospital Dr. Peset de Valencia como en el General de Castelló llevan años haciendo cateterismo sin que tengan cirugía cardíaca".