¿Después de 20 años en la alcaldía se afronta la candidatura de una forma diferente?

Yo tengo una ilusión tremenda y además he intentado contagiarla al equipo. Les he dicho mirad, nos lo estamos jugando todo, no somos propietarios de nada, tenemos que salir a la calle con la actitud de la primera campaña.

Ahora parece que está muy instalada esa idea de que lo ideal es estar ocho años en el cargo.

No, de eso nada. Eso son los argumentos que sacan para justificar decisiones anteriores. A Zapatero, que es un artista en la falsedad, lo han echado sus compañeros.

También Aznar optó por los ocho años.

Pero Aznar dijo que su error fue decirlo el primer día del segundo mandato, porque nos pasamos 4 años mirando quién era el sucesor. Lo tenía que haber dicho el último año del último mandato.

¿Qué tiene que pasar, qué objetivo se tiene que cumplir para que la alcaldesa diga ya he terminado mi misión?

No creo que sea un proyecto determinado. Mi ambición por Valencia no tiene límites. Estoy absolutamente emocionada de ver crecer las plantitas en el parque central; y es muy importante ver a la gente emocionada con el paseo del Cabanyal; estaré encantadísima de ver esa dársena en plena actividad o el delta del PAI del Grao; y ahora estoy encantada con hacer a Valencia referente tecnológico del Mediterráneo.

¿Y se ha planteado ver esa evolución de Valencia desde otra institución, desde la presidencia de la Generalitat?

Nunca, ya sabéis que no. Jamás habéis visto que yo haya tenido la menor flaqueza. A mí me gusta esto y además para recorrerse la comunidad entera también pasa el calendario. No es lo mismo cuando tienes cuarenta años que cuando tienes veinte más.

¿Le han hecho alguna propuesta en ese sentido, desde el partido, desde Madrid?

No, no, no. De verdad. Os lo prometo. Nunca he hablado con Rajoy ni con ningún otro de alrededor de que podía sustituir a Paco Camps.

¿En algún momento ha visto al presidente de la Generalitat como que habría que buscarle un sustituto?

Al revés. Lo he visto sufrir mucho y como yo sé que es una persona muy honrada, muy honesta y muy recta, ese sufrimiento a mí me hacía daño, pero él sabe que no ha hecho nada malo y que estaba perseguido, y por eso estaba más fuerte y con ganas de demostrar que no ha hecho nada. No lo he visto nunca en actitud de tirar todo por el aire, ni por sus hijos, ni por su mujer, no no, no se podía ir así.

Pues nos quedamos en Valencia. ¿Qué es lo inmediato?

Formar Gobierno. Yo tengo que pensar que hay concejales que están conmigo mucho tiempo y a lo mejor hay que hacer algún cambio, para no anquilosarse, para que entre sabia nueva.

Cíteme tres proyectos importantes.

No puedo, son muchos. Valencia está por culminar proyectos históricos que estaban anquilosados, como Jesuitas, el parque central, toda la zona del Grao y por supuesto el Cabanyal, que yo lo pienso llevar adelante sin duda alguna. Y digo también que hay que entrar a saco en reducir los procedimientos administrativos y en la implantación de la administración electrónica.

Me cuenta estos proyectos en un tiempo en el que todo el mundo habla de recortes.

Yo no voy a reducir concejales. Yo tengo los concejales que me da el pueblo y yo quiero que trabajen. Otra cosa son los cargos de confianza, que tampoco hay tantos aquí. Aquí tampoco hay coches asignados a los concejales, y si hay que ver la flota de coches de servicios, pues lo veremos. Pero yo quiero decir que nosotros hemos visto la crisis con responsabilidad y ya hemos hecho tres planes de austeridad, tres recortes importantes. Los primeros que apagamos la ciudad fuimos nosotros. Y nos seguiremos apretando el cinturón.

Cuando se habla de su política a menudo suenan las palabras confrontación y victimismo. ¿Lo ve usted así?

Yo creo que esa es una crítica interesada de la oposición. Yo he tenido una actitud de lealtad institucional muy clara siempre. Con lo que es bueno para la ciudad, como el AVE, me he volcado absolutamente. Lo que no he encontrado es esa lealtad del Gobierno. ¿Yo estoy encontrando lealtad en la marina, que no se me ha puesto al teléfono ni un jefe de gabinete desde hace un año y medio? ¿He encontrado lealtad en encontrarme un día de Reyes el decreto del Cabanyal? ¿Es victimismo denunciar que los únicos chiringuitos que van por el aire son los de Valencia cuando yo estaba viendo en Fuengirola el chiringuito a dos metros del agua y aquí están detrás del paseo?

Alguien puede pensar que no es justo atacar al Gobierno por los chiringuitos cuando se ha inaugurado un AVE que ha costado 6.000 millones de euros.

El AVE es un proyecto que trasciendo a gobiernos e incluso a generaciones. El acuerdo del AVE está firmado por Cascos y por mí y lo tienen que continuar otros y nosotros continuaremos otra vez. Son proyectos de mucha envergadura y tiempo. Con los chiringuitos se demuestra el agravio. Denunciar cosas que en otra parte no pasan es denunciar la verdad, no victimismo.

Pero esto ha generado una tensión muy fuerte.

Quien ha puesto en el valor de lo conveniente la tensión ha sido Zapatero. Acordaros cuando dijo vamos a tensionar un poco más que nos conviene. Los socialistas tiene una virtud especial, imputar a los demás lo que hacen ellos. Mal. Lo que hacen bien no.

Otra sensación generalizada es que se ha desinflado Valencia en la última legislatura, que la Copa del América vuela, que el estadio está en el esqueleto, son iconos que se han venido abajo.

Valencia es parte de España y toda España está sumida en una crisis brutal que se refleja en todas partes. Lo que se ha desinflado es España. Y precisamente quien dice eso de Valencia son los que por otra parte critican los grandes eventos. Esa es la incoherencia política. Cuando no hay grandes eventos, porque se han acabado, los critican porque no hay.

¿Con un Gobierno del PP cambiaría la dársena, el Cabanyal…?

Va a cambiar todo, todo, todo, para España y para Valencia. Va a cambiar todo porque la primera política social es el empleo y yo estoy convencida de que con el PP se creará empleo. Y con el PP en el Gobierno se respetará la autonomía local y se retirará el recurso del Cabanyal en el Tribunal Constitucional, que por otra parte mira cómo está. Yo pedí más independencia del Poder Judicial y se echaron todos encima y fíjese si tenía razón. Esto del Cabanyal ya sabemos qué camino va a llevar ante el Constitucional, por tanto hace falta una gran reforma de la Justicia. Y constituiremos un nuevo consorcio para la Marina.

Para esta nueva etapa no ha introducido cambios en la lista. Da la sensación de que quiere rematar con sus fieles.

Bueno, si te das cuenta hay gente nueva, se va renovando poco a poco. Y no, yo no me he planteado nada. A mí me encanta ser la alcaldesa de Valencia. Yo tengo pasión por esta ciudad y quiero continuar hasta que pueda dentro de la normalidad del calendario y de cómo pesan los años. Pero no me he planteado que esta sea la última, ni homenajes ni nada de eso. Ni tampoco voy a estar eternamente, lo natural.