Las Fallas 2013 han acabado con menos basura que el año pasado, consecuencia de una reducción en el volumen de los monumentos; un descenso del vandalismo, consecuencia de una fuerte reducción en el lanzamiento de petardos; pero con un importante número de inspecciones y sanciones. Sólo por el mal uso de material pirotécnico han sido multados 628 particulares y 40 locales, según el balance ofrecido ayer por el Ayuntamiento de Valencia.
La concejala de Limpieza, Mª Àngels Ramón Llin, compareció ayer para dar un parte que todos los años resulta desolador. Y eso que en 2013 lo ha sido menos de lo acostumbrado. Se han recogido 7.800 toneladas de basura y 2.300 de ceniza, un 2,5 y un 17 por ciento menos que el año pasado.
Parte de culpa de este balance, al menos en el caso de la ceniza, lo tiene el hecho de que los monumentos hayan sido más pequeños y que después de la última "cremà" lloviera y mojara los restos del fuego, dijo.
Para hacer frente a esta ingente cantidad de residuos, la concejalía puso un dispositivo especial que el día 19 llegó a las 1.171 personas. Experimentó, además , una fórmula de recogida de vidrio que, a través de 16 islas colocadas en Russafa y La Alameda y con la participación de jóvenes monitores, logró recuperar 9.534 kilos de cristal, un balance bueno que les anima a repetir el año que viene.
La concejala socialista Isabel Dolz, entiende, no obstante, que la imagen de Valencia durante las Fallas ha sido la de una "ciudad sucia y descuidada" en la que las bolsas de basura se han acumulado alrededor de los contenedores y los urinarios no han sido suficientes.
Menos vandalismo
También el vandalismo ha dejado en esta delegación una elevada factura de papeleras y contenedores rotos. Papeleras destrozadas, según Ramón-Llin, han sido 1.103, 81 menos que el año pasado. Multiplicadas por 53 euros, totalizan 57.356. Y los contenedores arrasados total o parcialmente han sido 104, siete menos que en 2012, que multiplicados por 1.200 euros totalizan un gasto de 124.800.
Aunque intolerable, la concejala agradeció el comportamiento de los valencianos, crecientemente "responsable" en este sentido, y anunció una campaña para el año que viene que insista en ese sentido cívico de la ciudadanía.
Esquerra Unida también cree que hay que ir más allá. Su portavoz, Amadeu Sanchis, es partidario, de hecho, de endurecer las medidas de control en el uso de la pólvora.
Presión a la pirotecnia
Y es que la pirotecnia sigue siendo la gran protagonista de las Fallas, este año con menos petardos pero con más inspecciones. Según explicó el concejal Miguel Domínguez, los bomberos han inspeccionado 245 fallas (25 de colegios), 35 mascletades de barrio y 27 espectáculos pirotécnicos organizados por la Junta Central Fallera.
La Policía Local, por su parte, ha visitado 214 locales a los que les ha impuesto 40 denuncias. Y ha sancionado por mal uso del material pirotécnico a 628 particulares, ninguno de ellos menor. El concejal lo justificó explicando que "no ha habido agobio de petardos" como otros años y que la policía "no ha ido detrás de los padres y los niños" para ve si cumplen la norma que impide a todo menor de 8 años lanzar una simple bombeta.
En total, se han decomisado 1.600 kilos de material pirotécnico: 34.893 unidades.
El balance se cierra con los daños en jardines y las motos. Según el parte de la concejala Lourdes Bernal, este año se han ocasionador 87.525 euros de pérdidas en jardinería, 22.885 de estos en jardines singulares, prácticamente como el año anterior. Las zonas más afectadas han sido La Alameda, las avenidas de Aragón y Blasco Ibáñez, Jardines del Real, Plaza de la Reina, las grandes vías y el Parterre.
Por lo que se refiere a las motos la actividad también se ha reducido. De los 4.978 vehículos de dos ruedas parados e investigados por la Policía Local, ha habido 249 sanciones y cerca de 50 inmovilizaciones, 34 por no llevar el seguro obligatorio.
Habrá más presión
sobre los mercadillos
El concejal Miguel Domínguez anunció ayer su disposición a reunirse con la Generalitat Valenciana para tratar el tema de los puestos y mercadillos que se colocan junto a las fallas. Este año hubo protestas de la sección especial por el retraso en los permisos y el consiguiente perjuicio que causa a sus arcas, que se nutren también de estos alquileres. Por contra, los técnicos de la Policía Autonómica han advertido al propio concejal de la inseguridad de este tipo de mercados y de las complicaciones que les generan los permisos municipales. Así pues, Domínguez se mostró dispuesto a sentarse con las partes y resolver por un lado la aceleración de permisos y por otro la inseguridad de algunos de estos puestos. Este año se han realizado 1.553 inspecciones en puestos de masas fritas (+22,2%), y otras 469 en barracas, barras, verbenas etc. imponiendo un total de 118 denuncias. Las verbenas sancionadas sólo han sido dos y en ningún caso se les ha prohibido repetir el año que viene, según dijo el concejal de Seguridad.
