El particular estilo con el que está decorada la furgoneta en la que vive este matrimonio ha ayudado a que su presencia no pasara desapercibida para la mayoría de los vecinos de la zona. De hecho, han sido muchos los que a lo largo de estos días en los que ha estado aparcado delante del IVAM, no han dudado en fotografiar el vehículo con sus cámaras y móviles, atraídos por el juego de colores del furgón. Cuando la pareja decidió colocar sobre el techo un conjunto de plantas, una patrulla de policía se acercó para avisarles de que no podían seguir «acampados» en el lugar, tal como reconoce uno de los dueños de la furgoneta. A pesar de ello, la pareja era conocida en el barrio, e incluso ayer, cuando la grúa se llevaba su «casa», una vecina solicitó a los agentes a que «les dejaran en paz», puesto que no estaban haciendo daño a nadie. En cambio, la policía no cambió de parecer y retiró el vehículo. p. v. valencia