Una despedida de soltero con disfraces, celebración de cumpleaños, grabar una felicitación de navidad de un gabinete de abogados... cualquier cosa pudo hacerse en la pista de hielo de la plaza del ayuntamiento en la campaña 15-16, pero seguramente, la ocurrencia más aguda fue la de una comisión de falla que intentó patinar con los trajes aunque, tal y como dicen en la Asociación de Comerciantes del Centro Histórico, «finalmente reinó la sensatez, porque había demasiada gente en la pista». Estas son las anécdotas y la cifra es poderosa: se ha duplicado el número de personas que, en algún momento, se calzaron los patines, pasando de 20.000 a 40.000 usos.

Esta es una de las cifras que aportó ayer la asociación como resumen de la campaña de Navidad, que resumen en una palabra: «éxito» y para la que consideran clave «la colaboración y el permanente diálogo con el ayuntamiento. La unión entre lo público y lo privado». Como se recordará, la asociación recibió con entusiasmo la decisión municipal —criticada desde otros sectores— de quitar el nacimiento que había en la plaza, trasladarlo a la plaza de la Reina y sustituirlo por un belén de la escuela valenciana en el salón de cristal. En este sentido, destacaban también la creación de un eje de dinamización con la plaza municipal de centro y dos extremos en la calle En Sanz (donde estaba el árbol rojo de Coca Cola) y la plaza de la Reina (con el árbol de Caser, el belén restaurado y la feria de artesanía).

La pista de hielo, que ayer todavía se estaba procediendo a desmontar, fue escenario también de acciones con la Consellería de Bienestar Social para permitir disfrutar a personas necesitadas. Y un detalle añadido no menos celebrado: la ausencia «de incidentes, lo que demuestra que los jóvenes van aficionándose cada vez más a esta disciplina deportiva». La conclusión es que la pista de hielo y el tren «llegaron para quedarse».

Electrofallas se despedirá de la Ciudad de las Artes

El festival de música electrónica Electrofallas celebrará el 12 de marzo su segunda edición y su despedida de la Ciudad de las Artes y las Ciencias, ya que la dirección del recinto ha comunicado a la organización un cambio en su política de eventos musicales. Dos escenarios y la presencia del DJ holandés Nicky Romero, uno de los más aclamados del mundo formarán parte de esta última edición, que el año pasado reunió a 20.000 personas.