El Ayuntamiento de València en colaboración con el Instituto Tecnológico de la Energía (ITE) y Las Naves realizarán una campaña para mitigar la pobreza energética en algunas zonas del distrito de Poblats Marítims. En concreto, la iniciativa consistirá en la elaboración de auditorías energéticas en 50 hogares de los barrios de Natzaret y la Malva-rosa.

Esta nueva campaña, que supone una de las 52 acciones diferentes que se quieren realizar por el consistorio en este ámbito, está integrado dentro del proyecto «Oficina Verde», el cual tuvo su inicio el pasado año con la colaboración de la Concejalía de Inclusión Sociolaboral y la empresa valenciana Aeioluz.

El proyecto, que ayudará a familias en riesgo de pobreza energética a través de la iniciativa europea Match UP, permitirá desarrollar un análisis adecuado de la situación de estos hogares. Para ello, se proporcionará a cada familia participante un «kit de eficiencia energética», el cual incorporará, según el comunicado realizado por Las Naves, «herramientas o aplicaciones como luces de bajo consumo, reductores de flujo para la ducha, termómetros o aislamientos de ventanas y puertas», entre otros elementos.

Asimismo y como base para la campaña, el pasado año ya se realizó en Natzaret y la Malva-rosa una asesoría energética a 21 familias, las cuales lograron ahorrar más de 580 euros al año. En esta línea, Salva Moncayo, coordinador técnico de Aeioluz, confirmó que a partir de septiembre se «realizarán más actividades» con el tratamiento de la pobreza energética como pilar fundamental y que ayudarán «en el tejido social» de la ciudad.

Una transformación urbana

La campaña del consistorio valenciano tiene como marco de actuación el proyecto europeo MatchUP, el cual tiene como objetivo principal la implantación de un modelo de regeneración urbana basado en la sostenibilidad y realizado a través de soluciones innovadoras en los sectores de la energía, la movilidad y las Tecnologías de Información y Comunicación (TIC).

Del mismo modo, este proyecto cuenta, entre otros, con el apoyo de instituciones como la Universitat Politècnica de València (UPV), ETRA Investigación y desarrollo o la Empresa Municipal de Transportes (EMT).