El Ayuntamiento de València ha pedido a la Generalitat Valenciana la posibilidad de contratar personal interino para cubrir el agujero que dejará en la plantilla la nueva normativa sobre jubilaciones anticipadas.

No es la fórmula que más le gusta al consistorio ni a los sindicatos, pero «dadas las condiciones especiales» que se han producido por ese decreto creen que estos interinos, que no pueden portar armas, pueden ayudar al menos durante el año 2019 en tareas de atención al público, vigilancia de edificios e incluso vigilancia callejera siempre que vayan acompañados de policías de carrera.

Como viene informando este periódico, el Consejo de Ministros aprobará probablemente este viernes el decreto de jubilación anticipada en la Policía Local, que permite jubilarse a los 59 años siempre que se cumplan una serie de años cotizados y en el cuerpo.

En València hay 247 agentes que cumplirían esos requisitos y de ellos 158 ya han dicho expresamente que quieren irse, con lo cual se abre un agujero en la plantilla que viene a sumarse a los doscientos agentes que ha perdido en los últimos años por la amortización de plazas.

Para cubrir ese agujero, los sindicatos han pedido a la Generalitat que habilite procesos exprés que agilicen la incorporación de nuevos agentes, una petición a la que ayer se sumó también el Ayuntamiento de València, que recuerda que en estos procesos el Ivaspe realiza ciertas pruebas y los ayuntamientos pueden reducir las suyas de 7 a 5.

Excepcionalidad

Pero además, y dada la emergencia que se ha creado, el ayuntamiento pide que la Ley de Coordinación de Policías Locales de la Comunitat Valenciana permita contratar personal interino durante el año 2019, lo mismo que hizo de manera excepcional hasta diciembre de 2018.

«Compartiendo la posición sindical de no contratar interinos, desde el ayuntamiento creemos que dadas las condiciones especiales con el decreto de jubilación anticipada de Policía Local por parte del Gobierno central, lo lógico es que se extendiera esta excepción durante el año 2019, tal y como se excepcionó para 2018. De esta manera, los ayuntamientos tendríamos la capacidad de realizar los procesos opositores de esas plazas y mientras podríamos al menos tener a personal interino que podría realizar muchas funciones, por ejemplo, la vigilancia de edificios o la atención al público, o también la vigilancia callejera siempre acompañados de policías locales de carrera», dijeron fuentes de la Concejalía de Personal.

Se trata exclusivamente de nombrar interinos para el año 2019 y «siempre en plazas que se convoquen inmediatamente para oposición, sin que estos interinos puedan consolidar en estas plazas de manera indefinida, ya que compartimos que la figura del interino no es la adecuada», insisten.

«Si hemos de asumir una reducción tan drástica de personal de golpe, se asumirá y se gestionará, como no puede ser de otra manera, pero pensamos que se puede hacer una transición amable a esta situación, ya que el decreto de jubilación anticipada influye sobremanera en la gestión de las plantillas», concluye.