El preocupante estado de conservación de la Real Senyera, así como de su facsímil, ha llevado al Ayuntamiento de València a impulsar un estudio técnico encaminado a adquirir un amplio conocimiento sobre la manufactura original de la pieza y poder así determinar las líneas a seguir en futuras intervenciones.

Para ello, la Concejalía de Patrimonio y Recursos Culturales prepara un convenio con la Universitat de València para integrarse como institución pública en el proyecto internacional SILKNOW, que promueve la conservación y mejor conocimiento del patrimonio europeo sedero de los siglos XV al XIX incorporando diversas ramas de investigación, desde la historia del arte a las nuevas tecnologías.

La Real Senyera, que porta las armas de la Casa de Argón con la corona desplegada sobre campo azul otorgada por Pedro El Ceremonioso a la ciudad en 1364, es de tejido de seda, con bordados y recamados y pende de un mástil que se remata con un yelmo de plata cincelada, con corona de oro y un murciélago de alas explayadas también de plata, hecho por el orfebre Simón de Toledo en 1638.

El objetivo del Consistorio era que la enseña más emblemática y venerada por los valencianos, que ya ha superado los 90 años, luciera con todo su esplendor una vez restaurada para participar en los actos del 9 d'Octubre, Día de la Comunitat Valenciana, este año.

Por eso, se habían "cuadrado" las fechas y se quería aprovechar que se vaciaba de piezas del Museo Histórico Municipal para su remodelación, entre ellas la Senyera, para acometer asimismo la restauración de la bandera y que estuviera lista en esa fecha.

Sin embargo, fuentes municipales han indicado a EFE que la prioridad ahora es hacer el estudio técnico "que determine cuál es su estado y lo que necesitaría" y una vez se tenga la información, "habrá que valorar los tiempos y ver si la restauración se puede hacer con tiempo suficiente para que esté lista el próximo 9 de octubre".

La concejala Glòria Tello siempre ha defendido que la restauración de la enseña valenciana debería ser "compatible" con el hecho de que estuviera disponible para esa festividad.

En el estudio se quiere incidir en aspectos relacionados con la tejeduría (hiladuras, ligamentos, uniones, bordados o pasamanería), la analítica de componentes (pigmentos en el teñido, análisis de las partes metálicas y de la bandera en conjunto) o los agentes de degradación.

Asimismo se buscan incluir aspectos como la comparativa con textiles coetáneos, así como con banderas de similar naturaleza existentes en las colecciones de los museos que participan en el proyecto u otras.

"Partiendo de esa base se podrá tomar las decisiones que convengan en relación a futuras intervenciones de restauración tanto de la Real Senyera como de su facsímil", según las mismas fuentes.

El convenio no abordará plazos u otros detalles de la restauración sino que es una "fase previa de investigación y valoración técnica", cuyo resultado servirá para que la Concejalía decida "si conviene restaurar, cómo y cuándo para que esté lista el 9 de octubre, sea del año que sea".

La concejalía se plantea la restauración de la Senyera pero "a un ritmo adecuado" que permita, señalan las fuentes, la recogida de "todo el asesoramiento técnico necesario que asegure las decisiones más adecuadas para la intervención en un elemento patrimonial tan importante como lo es la Real Senyera".

Este grupo de investigación no será el encargado de la restauración, la cual, al estar sometido el Ayuntamiento a la normativa de contratación pública, se adjudicará por contrato menor o se abrirá a un concurso según el importe.

El proyecto SILKNOW, liderado por la Universitat de València, agrupa al Instituto Valenciano de Conservación y Restauración de Bienes Culturales (Ivacor), así como a instituciones y museos de toda Europa.