Un estudio ambiental y paisajístico encargado por Metrovacesa a la consultora Evren descarta que el PAI de Benimaclet dañe a la huerta. El informe subraya que la Ronda Norte transformó un espacio que ahora carece de valor ambiental. El documento es de parte (Metrovacesa es el principal impulsor del proyecto), pero fuentes del sector inmobiliario destacaron que el análisis es riguroso y que la consultora tiene «un prestigio que no se va a jugar por hacer un estudio sesgado». Metrovacesa mantiene su intención de desarrollar el PAI con 1.345 viviendas a pesar de la oposición del alcalde de València, Joan Ribo, tras la campaña del colectivo vecinal Cuidem Benimaclet que defiende que el proyecto es una amenaza para la huerta y debe rebajar su edificabilidad. La promotora Urbem, que tiene un 28 % del suelo, también se opone a una reducción de la edificabilidad. «Queremos que se ejecute como está aprobado en el plan parcial vinculado al PGOU de 1988 (que es el que está en vigor)», advirtieron desde la promotora valenciana.

La consultora Evren ha realizado el informe con un geólogo, un técnico superior en gestión y organización de recursos naturales y paisajísticos, dos licenciados en ciencias biológicas (uno de ellos en la especialidad de zoología y el otro en la de botánica), un ingeniero de caminos y un arqueólogo. El estudio analiza el medio natural y el patrimonio cultural del sector, así como la compatibilidad del desarrollo urbanístico con los objetivos de la ley de la Huerta y el Plan de Acción Territorial (PAT) de la Huerta.

Los responsables del análisis no han detectado «factores que otorguen un elevado valor ambiental al territorio estudiado. Los factores del medio abiótico (los componentes químicos y físicos sin vida del medio ambiente) están ampliamente representados a nivel regional e incluso internacional. Los factores del medio biótico (el de los seres vivos) son los típicos presentes en una zona urbana-periurbana de manera que una vez desarrollado el sector tanto la vegetación como la fauna presente podrán integrarse o recolonizar las zonas verdes que se construyan».

Sin valor paisajístico

Los analistas creen que el terreno carece de valor paisajístico ya que la construcción de la Ronda Norte fragmentó el territorio. El informe subraya que el sector quedó desligado de la huerta, que está en la otra parte de la Ronda Norte. El espacio urbano «se alteró de manera significativa hasta el extremo de que el paisaje actual a un lado y al otro de la ronda es fácilmente distinguible por cualquier observador. Ni desde el punto de visto objetivo ni desde el subjetivo puede asimilarse el paisaje existente en la zona del sector de desarrollo con el que el que está en la otra parte de la Ronda Norte».

El informe de la consultora Evren destaca que ni el estudio de pase del PAT de la Huerta ni el de paisaje de la revisión simplificada del PGOU de València «han detectado valores paisajísticos dignos de protección».

Acequia integrada

Los responsables del informe inciden en que «el desarrollo del sector no elimina ni afecta directamente a los elementos patrimoniales catalogados. Los ramales de acequia existente necesarios para mantener el riego en la zona oriental de la Ronda Norte y los caminos históricos se integran en la ordenación prevista». El análisis subraya que el «proyecto del sector es compatible con la ley de la Huerta y con el desarrollo de esta mediante el PAT de la Huerta. El Plan de Acción Territorial de la huerta clasifica el sector como 'Planeamiento en vigor' por lo que no imposibilita su desarrollo y la ordenación propuesta cumple con las directrices de la PAT».

Por otro lado, el estudio recalca que el análisis visual «permite concluir que el desarrollo previsto en el sector no tiene impactos significativos en los alrededores de la Ronda Norte y la Sur ya que lo que queda dentro del espacio de los nuevos edificios son suelos 'urbanizados-urbanos' o en los que se pueden realizar desarrollos por parte del municipio de Alboraia».