Pasarán de vivir en asentamientos de infravivienda, en pisos precarios y en una caravana a hacerlo en una vivienda digna propiedad del parque público municipal del Ayuntamiento de València. Se trata de cinco familias -todas con menores a cargo- que el próximo 16 de diciembre entrarán a vivir en viviendas sociales y pagarán por ellas un alquiler de entre 40 y 100 euros al mes.

De hecho, la Junta de Gobierno Local aprobará hoy la entrega de llaves de las viviendas por un trámite de urgencia tras la visita que realizó la concejala de Igualdad y Políticas Inclusivas, Isabel Lozano, a varios asentamientos de la ciudad.

Las viviendas se adjudican mediante el Programa de Acceso a la Vivienda, que implica «seleccionar a aquellas familias de mayor implicación y adherencia a la intervención técnica, que apunte a un pronóstico más exitoso en el realojo». Además, en la propuesta de acuerdo se recalca que en las baremaciones se han incluido «ítems de desahucio/desalojo, víctima de violencia de género, acogimiento familiar y circunstancias extraordinarias».

Los contratos de alquiler son «temporales» y los arrendatarios se comprometen «a cumplir tanto las estipulaciones del contrato como las medidas de inserción social y laboral anexas al mismo».

Por otra parte, la Junta de Gobierno Local también aprueba hoy un convenio de colaboración con la fundación Salud y Comunidad para colaborar en el programa «Mussol» creado por esta entidad para desarrollar distintas acciones de acogida para el colectivo de personas sin hogar. La colaboración municipal asciende a 40.000 euros al año.

Para personas sin hogar

El objetivo del convenio es promover una colaboración mutua «para compartir los recursos propios destinados a promover una mejora de la calidad de vida y de la salud de las personas sin hogar e indomiciliadas, con problemáticas asociadas al alcohol, drogas y/o salud mental, bajo criterios de intervención técnica, objetividad y garantía de los derechos de las personas».